La presión internacional logró la liberación de varios periodistas extranjeros en Venezuela, aunque algunos de ellos fueron deportados. Aleteia constató que la capital del país sudamericano está repleta de comunicadores que esperan cubrir la caída de la dictadura
“Estamos frente a una tiranía que se solaza en perseguir y encarcelar periodistas, en abierto desafío a la comunidad internacional. Es también un acto de cobardía que los periodistas venezolanos y extranjeros estamos repudiando con toda nuestra firmeza. Pero ¡Maduro no podrá contra las fuerzas de la democracia y de la prensa libre!”.
Lo afirma Gregorio Salazar, ex secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) y coordinador de la Federación Internacional de Periodistas (FIP) para América Latina” en conversación exclusiva con Aleteia al ser consultado sobre la reciente liberación de periodistas extranjeros que estuvieron recluidos en El Helicoide tras cubrir las protestas en Venezuela.
Agregó en alusión al “usurpador”, como lo calificó formalmente la Asamblea Nacional tras la asunción de un nuevo mandato presidencial ganado de forma fraudulenta, que “su salida del poder está cada vez más cercana”.
Sólo en enero se han reportado al menos 40 ataques a la libertad de expresión, que incluyen 19 detenciones de trabajadores de la prensa. En este marco, se les arrebató la libertad en menos de una semana a varios comunicadores sociales cuando ejercían su oficio en el país.
Las acciones no obedecen a un hecho aislado “ni responden a que un periodista haya estado en un lugar no indicado”. Se trata de medidas sistemáticas que se suman a la política de crear leyes, para “por la vía de la censura y de las detenciones” acorralar una profesión como ésta”, señaló el secretario actual del SNTP, Marco Ruíz.
Periodistas de Chile, Colombia, España y Francia
Tres periodistas de la agencia Efe: el español Gonzalo Domínguez y los colombianos Leonardo Muñoz y Maurén Barriga fueron detenidos el miércoles por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), junto al motorizado venezolano, José Salas.
El equipo fue liberado este jueves, mientras los funcionarios que los retuvieron les pidieron disculpas tras asegurar que cometieron “un error”. En las últimas 72 horas se registraron los arrestos de dos periodistas de Chile que además fueron deportados, otros dos franceses y dos venezolanos ya liberados.
La reacción internacional fue contundente e inmediata: desde Colombia hubo pronunciamiento de la cancillería. Y este jueves, Trujillo escribió: “Hablé telefónicamente con Leonardo Muñoz y Maurén Barriga, periodistas colombianos detenidos en Caracas, para saludarlos y transmitirles un saludo del presidente Iván Duque”. Dijo que los liberados “se encuentran bien” y agregó que los esperaban “con los brazos abiertos”.
Muñoz, quien se desempeña como fotógrafo en Bogotá, “fue detenido al mediodía cuando recorría junto al motorista José Salas, algunos barrios caraqueños para registrar las protestas que fueron convocadas por el Parlamento opositor”, reseñó EFE.
De los dos se conoció de su paradero solo en horas de la noche, cuando el Sebin detuvo a otros corresponsales. Barriga y Domínguez fueron esperados por cinco agentes del Sebin “fuertemente armados en el hotel donde se hospedaban y trasladados a la sede del cuerpo de seguridad conocida como Helicoide”, (destinado a “presos políticos”).
Enérgica reacción desde la ONU
También este jueves, la Organización de Naciones Unidas (ONU) consideró “fundamental que los periodistas, ya sea en Venezuela o cualquier otro lugar del mundo, puedan informar libremente de los acontecimientos y que sus derechos sean plenamente respetados”.
La reacción surgió de Stéphane Dujarric, portavoz del secretario de Naciones Unidas, António Guterres, al ser consultado sobre el caso; mientras que Mónica Grayley, la portavoz de la presidenta de la Asamblea General de la ONU, María Fernanda Espinosa, recordó que “la libertad de prensa es una necesidad”.
Agregó que “los periodistas deben tener sus derechos protegidos” al insistir en que la prensa “no debe tener impedimentos” para realizar su trabajo. “Tienen que trabajar en un ambiente libre y seguro y, por supuesto, tener garantizada su integridad física”, sostuvo.
También fueron liberados dos periodistas franceses del canal TMC que permanecían detenidos desde el martes cuando cubrían la crisis en Venezuela. Ese día en horas de la noche fueron arrestados los comunicadores de Televisión Nacional de Chile (TVN) Rodrigo Pérez y Gonzalo Barahona y deportados a su país de origen.
Francia interviene por sus periodistas
El caso llamó la atención del embajador de Francia en Caracas, Romain Nadal, quien hizo internacional la denuncia sobre la detención de Pierre Caillé y Baptiste des Monstiers.
“Hemos estado en contacto con las autoridades venezolanas desde el momento en que nuestros compañeros periodistas fueron arrestados. Exigimos su liberación y hacemos todo lo posible para conseguirlos tan pronto como pueda”, trinó en francés el diplomático.
Tres horas después, escribió junto a una foto con ellos: “Muy contentos de encontrar a nuestros compañeros @piercaille @BdesMonstiers periodistas por aliviados @Qofficiel y un poco cansados. Están bien y abandonarán Venezuela en unas horas. Gracias a todos los que se movilizaron por ellos. @afpfr@EmbaFrancia @JY_LeDrian”.
Desde Bucarest, la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, había exigido la liberación de los periodistas detenidos “sin motivos” en Venezuela. Los gobiernos de España, Francia y Colombia se sumaron a esa exigencia.
La Federación Internacional de Periodistas (FIP), que representa a 600 mil periodistas, exigió este jueves el “cese de acciones hostiles contra periodistas”, recordando a través de Anthony Bellanger, que “la libertad de información es innegociable en cualquier sistema democrático… ¡Exigimos que esta se respete!”.
Siguen llegando periodistas a Caracas
Aleteia pudo constatar además que los principales hoteles del casco capitalino tienen ocupación plena por parte de periodistas de diversas agencias del mundo. Los comunicadores buscan cubrir de primera mano los acontecimientos que mantienen en tensión al país, en espera de un desenlace que conduzca a los venezolanos a la libertad.
El arribo de los profesionales de la comunicación se intensificó tras las marchas del 23 de enero, cuando en el marco del 61 aniversario del fin de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez, el jefe del Parlamento, Juan Guaidó, se proclamó presidente interino de Venezuela.
Desde entonces, el dirigente político de 35 años ha cosechado un inédito respaldo internacional que suma ya más de treinta países e importantes organismos internacionales.