El secreto de Rubén Cuenca, el gran protagonista de la Vuelta Automovilística al Ecuador
Para ayudar a Aleteia a continuar su misión, haga una donación. De este modo, el futuro de Aleteia será también el suyo.
Ecuador se quedó con las ganas de que alguna etapa del Dakar 2019 –prestigiosa carrera de rally que hace rugir desde hace algunos años a Sudamérica- pasara esta vez por su territorio, algo que finalmente no acontecerá. Pero esto no significa que en este país no se continúen “calentando los motores”.
Durante estos días se desarrolla la Vuelta Automovilística al Ecuador, un famoso acontecimiento que hace vibrar a los amantes del rally y que tiene al piloto Rubén Cuenca como uno de los grandes protagonistas.
Este prestigioso conductor fue quien terminó las primeras etapas como líder, pero esto no ha sido algo que lo ha conseguido solo. Efectivamente, este piloto de rally guarda un gran secreto: una ferviente devoción por la Virgen del Cisne, famosa advocación mariana en el país sudamericano.
Es que “La Churonita”, como se le dicen popularmente, se ha transformado en su mejor copiloto y en su carro, un flamante Mitsubishi, viaja con una estampita, quien lo acompaña durante la travesía. No en vano hasta algunos medios ecuatorianos, como La Hora, se animaron a titular “Cuenca avanza con la Churonita”.
[protected-iframe id=”dc7c5f607dd285978e13d783d760235b-95521297-99574856″ info=”https://www.facebook.com/plugins/post.php?href=https%3A%2F%2Fwww.facebook.com%2Fpermalink.php%3Fstory_fbid%3D2206989525999816%26id%3D219501674748621&width=500″ width=”500″ height=”482″ frameborder=”0″ style=”border:none;overflow:hidden” scrolling=”no”]
“Con eso logramos tener el mejor tiempo que definió la posición. Salimos en cuarta ubicación. Creo que hicimos un buen tiempo, empatando con Martín Navas”, dijo este hombre a este medio durante las primeras etapas, quien mantiene la fe en Dios y la ayuda de la Virgen, pero que reconoce que no debe bajar los brazos pues mantener la hegemonía en la carrera requiere de mucho esfuerzo.
Te puede interesar:
Fernanda Kanno, primera piloto peruana en el Rally Dakar
No obstante, a pesar de la dureza del desafío y hasta diversos inconvenientes cotidianos con el vehículo en este tipo de competencias, Cuenca no deja de agradecer también a la gente y el apoyo recibido en cada paso.
“Algo muy gratificante. Un recibimiento muy caluroso incluso por parte de las autoridades. Por ejemplo, en El Oro, hicieron un almuerzo para todos los equipos”.
Mira la galería de imágenes:
No es el único devoto en la carrera
Pero Cuenca no está solo y la devoción por la Virgen del Cisne es compartida por otro de los grandes competidores. Es ahí donde aparece el nombre de Luis Valverde, un veterano piloto que hace más de 10 años que participa de esta competencia. Este hombre, que también disputa el campeonato nacional de rally, también se presenta ante la afición como devoto de la Virgen e incluso se ha encomendado a ella antes del inicio de la competencia.
Su experiencia y trayectoria representa tan solo un ejemplo más del cruce de generaciones que participan de este evento tan destacado en Ecuador sobre ruedas, una instancia que recorre todo el país y que pasa por famosas localidades como Cotopaxi, Chimborazo, El Oro, Loja, Azuay, entre otros, en busca de un sueño.
Y mientras eso sucede, y pasan las etapas, ahí está la Virgen del Cisne, la curiosa copilota de un rally para el mejor de los recuerdos.
Te puede interesar:
La Virgen del Cisne, la advocación que cautiva a Ecuador en agosto
