La audiencia con el Papa y los obispos de la CEV, se cumple este 11 de septiembre, centrando el interés en la crisis humanitaria que ha obligado al desplazamiento forzado de millones de venezolanos
“Nos llama enormemente la atención, el interés que existe (en todas las instancias del Vaticano) por la situación de Venezuela, de querer ayudar cada uno desde su perspectiva en lo que es posible, en el dolor, el sufrimiento y las restricciones que tiene la población venezolana. Esto nos anima como obispos a poder dar una respuesta de paz, de serenidad, y sobre todo de fe y de profunda esperanza”.
Esta es la percepción del cardenal Baltazar Enrique Porras Cardozo, tras cumplirse los primeros cinco días de la visita ad limina que, junto a más de 40 integrantes de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), realiza a la Santa Sede, y cuya actividad central ha sido la audiencia con el Papa Francisco este martes 11 de septiembre.
El balance del arzobispo de Mérida y administrador apostólico de la arquidiócesis de Caracas, se produjo al culminar la reunión cumplida el lunes 10 de septiembre con el cardenal Marc Ouellet, prefecto de la congregación para los obispos, una de las actividades que han servido de antesala a la audiencia con el Obispo de Roma.
“La experiencia del encuentro de los obispos con las diferentes instancias de la curia romana, es ciertamente un momento muy especial”, hizo saber Porras desde Roma, a través del padre Duglas Briceño, responsable de prensa de la arquidiócesis de Mérida.
“Poder compartir con quienes tienen la visión del mundo entero y que tienen muy de cerca la realidad venezolana, nos hace sentir pues un interés mucho mayor de entrega y de servicio al pueblo venezolano”, expresó el cardenal venezolano.
Con relación al encuentro con Santo Padre Francisco, dijo que él “conoce muy bien lo que es la realidad venezolana y ciertamente en su corazón y en el de todos nosotros está poder sentir esa cercanía; esa capacidad que el Papa tiene de sentir y de compartir con todas las situaciones de los seres humanos y también con todos nosotros”.
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Porras comentó que esta experiencia les “está sirviendo a todos los obispos venezolanos y a todos los sacerdotes que nos acompañan en estos días, en un sentido mucho más fuerte de servicio y de entrega a los demás”. Pidió a los venezolanos más oración y afectos “para que entre todos podamos construir lo que soñamos, el poder compartir vivir en paz, en justicia, en serenidad, en transparencia y verdad pues a todos”.
Según el derecho canónico, cada responsable de una diócesis dentro de la iglesia católica, está en el deber de acudir al menos cada cinco años, a visitar las tumbas de los santos apóstoles Pedro y Pablo y presentar la relación quinquenal al Papa.
En esta ocasión, desde Venezuela acuden al Vaticano, más de 40 obispos para presentarles al Papa Francisco sendos informes de la realidad pastoral y del contexto nacional, en nombre de las 9 arquidiócesis, 26 diócesis, 3 vicariatos apostólicos, 2 exarcados y 1 ordinariato militar que componen la iglesia católica en este país suramericano.
