Mensaje para expertos reunidos en Viena: Sí a las tecnologías, pero “no podemos subestimar el lado oscuro del nuevo mundo digital” “La proliferación de imágenes de violencia y pornografía cada vez más extremas altera profundamente la psicología e incluso el funcionamiento neurológico de los niños”, se lee en el mensaje enviado por el cardenal Pietro Parolin, Secretario de Estado a los participantes en la Reunión Anual de la Comisión para la Prevención de Delitos y Justicia Penal (CCPCJ), en curso en Viena del 14 al 18 de mayo de 2018.
“Los avances tecnológicos conllevan muchos resultados positivos, pero no podemos subestimar el lado oscuro del nuevo mundo digital en el que vivimos”.
En este contexto, indicó que la prevención del “cybercrime” es objeto de gran atención por parte del Papa Francisco. En especial se subrayó el esfuerzo internacional y urgente de “poner fin a todas las formas de violencia contra los niños”.
“El Papa Francisco está convencido de que un desarrollo digno y sostenible puede alcanzarse solamente si los niños, que son el futuro de la familia humana, se colocan en el centro de atención, favorecidos y protegidos en los años decisivos de su crecimiento”.
Asimismo, instó a actuar de frente a las amenazas a la dignidad humana como “el “ciberacoso, el sexting y la sextortion” que “corrompen las relaciones interpersonales y sociales”.
Además de “las formas de seducción sexual a través de la red, la visión en vivo de violaciones y de violencias, así como la organización en línea de la prostitución y de la trata de personas, y la incitación a la violencia y el terrorismo son ejemplos claros de delitos horribles que no pueden ser tolerados de ninguna manera”.
“La Santa Sede y la Iglesia Católica son conscientes de su contribución a la formación de la conciencia moral y de la sensibilización pública. Por lo tanto, cada una a través de su propia actividad, quiere colaborar con las autoridades políticas y religiosas y con todos los actores de la sociedad civil, especialmente los creadores y los gestores de tecnología, para que los niños puedan crecer serenamente en un ambiente seguro”.
Igualmente, señaló la “difusión de nuevas formas de actividad delictiva, o de formas antiguas implementadas con nuevas y poderosas herramientas”. E instó a “contrarrestarlas de manera efectiva”.
Por esta razón, Parolin explica que “en un mundo en constante cambio, el papel de las Naciones Unidas y, específicamente, de la UNODC es particularmente crucial”.
Por ello, “el Papa Francisco desea el mejor resultado para el trabajo de esta Comisión y envía su bendición a todos los participantes”.
Precisamente, el pasado 6 de octubre en el Vaticano tuvo lugar el “Congreso mundial sobre la dignidad del menor en el mundo digital”.
Ese evento fue apoyado por el papa Francisco y así como la “Declaración de Roma”, que apela a los esfuerzos de gobiernos, líderes religiosos y académicos , industrias tecnológicas, fuerzas del orden, organizaciones médicas, educadores y organizaciones de la sociedad civil, para que contribuyan a abordar juntos un problema que supera las posibilidades de los sujetos individuales.