A pesar de que reconocemos la importancia de alimentación adecuada en los niños, muchas veces descuidamos algunos aspectos fundamentales de su dieta. Aquí unas estrategia para alimentarles de forma saludable
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La etapa escolar es el momento ideal para reafirmar los buenos hábitos alimentarios, introducir pautas para una alimentación saludable y ofrecer una buena formación en un aspecto tan relevante para la vida: la salud nutricional.
La mayoría de los expertos aconsejan seguir los principios de la dieta mediterránea pues son numerosos los estudios científicos que la avalan.
Sin embargo, la realidad que nos encontramos los nutricionistas es bien distinta. A nuestras consultas acuden familias cuya alimentación es deficitaria por distintos motivos. El déficit de algún nutriente esencial, como por ejemplo el Omega 3, afectaría al crecimiento de nuestros pequeños y a su desarrollo cognitivo.
Para evitar esta situación, es importante primero conocer los errores más comunes que encontramos en la alimentación de los niños y son los siguientes:
- Bajo consumo de frutas y vegetales
- Excesivas cantidades de azúcares, grasas saturadas y sodio en los productos consumidos a diario
- Bajo consumo de lácteos
- Omisión del desayuno o de otro tiempo de comida
Una alimentación poco saludable
Un estudio realizado en Argentina por el Centro de Estudios de Nutrición Infantil (CESNID) arroja algunos datos preocupantes. Uno de ellos es que 4 de cada 10 niños menores de 3 años tienen un estilo de alimentación poco saludable.
Este calificativo lo reciben porque consumen:
- un 35% de alimentos panificados o galletitas ricas en azúcares y grasas
- un 18% de jugos y gaseosas
- un 10% de pizzas, empanadas y sándwiches
- El restante 37% corresponde a otros alimentos de pobre calidad nutricional.
Otro de los datos a considerar es la corta duración de la lactancia materna y la temprana incorporación de opciones poco saludables (1 de 4 alimentos o bebidas) después de los 6 meses.
Lamentablemente estas conductas se pueden agudizar a partir de los 3 años. Por lo tanto, podemos preguntarnos si esto podrá también estar sucediendo en nuestro hogar.
¿Cómo se están alimentando nuestros hijos?
¿Qué podemos hacer como padres para mejorar su alimentación?
Primero, saber que la alimentación de los niños varía en cada etapa. En los 3 primeros años el alimento juega un rol fundamental, pero en la etapa escolar toma un lugar secundario.
Además, entre los 3 a 5 años disminuye la ingesta de alimentos y va variando conforme a la edad.
Es importante corregir las conductas que no son beneficiosas para la salud alimentaria de los niños:
- Reemplazan alimentos saludables por snacks, bebidas, golosinas que aportan solo calorías, azúcares simples, sodio, grasas saturadas y ningún nutriente, lo que favorece el desarrollo de enfermedades tempranas de hipertensión, obesidad, diabetes.
- Seleccionan un solo ingrediente del plato servido, la variedad de alimentos hace que sea una dieta incompleta nutricionalmente.
- Se saltan alguna comida, como el desayuno porque no tienen apetito. Está comprobado que si los niños no desayunan presentan un menor rendimiento escolar debido a la falta de glucosa, que es la que aporta la energía necesaria para el buen funcionamiento del cerebro.
- Inapetencia por frutas y vegetales, el consumo suficiente de estos alimentos es fundamental ya que aporta nutrientes esenciales como fibra, vitaminas y minerales para lograr un adecuado crecimiento y desarrollo.
Estrategias para alimentar bien a los niños
Esta guía diseñada por expertos en nutrición de la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard puede ayudarte a educar a tus hijos y ofrecerles una alimentación saludable.