Segunda película de Alex Garland, basada en la novela de Jeff VanderMeer Alex Garland, novelista que escribió los guiones de La playa, 28 días después y Nunca me abandones, entre otros, debutó en la dirección hace unos tres años con una película brillante y compleja: Ex Machina, encuadrada en el ámbito de la ciencia ficción. Su segundo y esperado filme es una producción de Netflix inspirada libremente en la novela de Jeff VanderMeer, Aniquilación, primer volumen de su Trilogía Southern Reach.
Para el reparto ha vuelto a contar con Oscar Isaac en un breve papel, actor con el que trabajara en su primer largometraje. El protagonismo recae en cinco mujeres, interpretadas por Natalie Portman, Jennifer Jason Leigh, Gina Rodriguez, Tuva Novotny y Tessa Thompson, un equipo que va a adentrarse en una zona ambiental de la que los soldados no suelen regresar, o lo hacen completamente cambiados, como si fueran autómatas, hombres sin alma o sin memoria.
Lena (Natalie Portman) aún llora la desaparición de su marido (Oscar Isaac) en el Área X cuando una noche, inesperadamente, él aparece en casa. Parece un fantasma o un individuo extraviado en las nieblas de la amnesia. Pronto enferma y lo trasladan a un perímetro de seguridad, donde operan soldados y científicos, y donde la doctora Ventress (Jennifer Jason Leigh) le explica a Lena que va a encabezar un grupo de mujeres para que investiguen esa zona donde, tres años atrás, un faro se vio inundado por un resplandor.
Desde entonces el paisaje ha ido cambiando, los extraños sucesos que asolan la zona (del que se especula que puede obedecer a “un fenómeno religioso o extraterrestre o una dimensión superior”) se van expandiendo, creando un entorno en el que va “produciendo mutaciones en el entorno”: flores de distinta especie que nacen de la misma rama, animales que han variado de color y de forma y a veces incluso de tamaño, extrañas nebulosas de colores en el aire…
El equipo, al que acaba sumándose Lena para obtener respuestas, investiga y toma muestras de los parajes por los que se mueven: bosques, ciénagas, marismas, pantanos, regiones donde predominan la maleza y las criaturas que se han adaptado al medio. En estos parajes el tiempo también se expande y se contrae y la mente humana no es capaz de acostumbrarse.
Para lectores y cinéfilos entrenados hay dos elementos referenciales en ese territorio donde se producen enigmas, mutaciones y peligros: la Zona de los hermanos Strugatski en su novela Picnic extraterrestre (y, por ende, en la libre adaptación que hizo Tarkovski en Stalker) y los paisajes cuyos cambios afectan a la mente humana, propios de las historias concebidas por J. G. Ballard.
Alex Garland parece haber tomado referencias de unos y de otros (y de Arrival. La llegada) para ir tejiendo una trama en la que las palabras iniciales acaban siendo más importantes de lo que parecen: nacemos de células que se replican y envejecemos por un fallo genético, y que un paisaje mute o que nos sometamos a cambios tal vez no debería ser juzgado como una amenaza, sino como otro peldaño acorde con las evoluciones.
Aniquilación es un filme que va enlazando géneros, tal y como ya han apuntado algunos críticos, y lo hace de manera eficaz y, como en la mencionada Arrival, sin que nunca los efectos especiales o los momentos de acción o suspense contaminen o se coman a los personajes (como viene sucediendo en tantas adaptaciones de cómics de superhéroes), hasta alcanzar un final que admite varias teorías y que nos servirá para elucubrar durante un tiempo. Esencial, por cierto, es la música compuesta por Geoff Barrow y Ben Salisbury, quienes crean un clima onírico y perturbador, justo lo que transmite la película.
Ficha Técnica
Título original: Annihilation
País: Reino Unido
Director: Alex Garland
Guión: Alex Garland (basado en la novela de Jeff VanderMeer)
Música: Geoff Barrow, Ben Salisbury
Género: Aventura / Drama / Fantasía
Duración: 115 min.
Reparto: Natalie Portman, Jennifer Jason Leigh, Gina Rodriguez, Tuva Novotny, Tessa Thompson, Oscar Isaac