Tener un hijo es una experiencia que le cambia la vida a cualquiera, seas una tenista famosa, una ama de casa o una ingeniera. Serena Williams es una mujer que ha tenido sus altas y bajas en el deporte y en su vida personal, después de todo, son más de 20 años como atleta profesional, siendo víctima también de constantes críticas y burlas por estar en el ojo público, tanto por su juego como por su musculoso cuerpo.
Pero con su primera hija ya en brazos y su retorno a las canchas en marzo de 2018, Serena -casada en 2017 con Alexis Ohanian- confesó a la revista Vogue America que prefiería tomar todos esos aprendizajes de sus distintas experiencias y ayudar a su primogénita, Alexis Olympia Ohanian, para convertirse en una mujer más segura de sí misma.
La lección que más espera enseñarle a su hija es: “no te limites”.
¿Por qué esto es tan importante para ella? Williams recuerda que hace años su meta era ganar 18 títulos de Grand Slam para igualar la marca de las leyendas del tenis Christine Evert y Martina Navratilova, y cuando estaba muy cerca de lograrlo, el estrés y la presión que ella misma se autoimpuso comenzaron a tener un impacto negativo en su desempeño.
Entonces, su entrenador, Patrick Mouratoglou, se le acercó y le dijo: “Serena, esto no tiene sentido. Estás estresada por ganar 18 títulos, ¿por qué no 30 o 40?”
La tenista sintió que en ese momento se le prendió un bombillo: “¿Por qué quería lograr una meta para igualarme a otra persona cuando podía destacar por mi propia cuenta? Creo que a veces las mujeres nos limitamos. No estoy segura por qué lo hacemos, pero sé que a veces se nos enseña a no soñar tan en grande como los hombres, a no creer que podemos llegar a ser la presidenta o CEO de una empresa, cuando en la misma casa, a los niños sí se les dice que pueden ser cualquier cosa que deseen. Por eso estoy tan feliz de haber tenido una niña, para enseñarle que no existen los límites cuando algo se desea con el corazón y se lucha por ello”.
Actualmente, Serena cuenta con 23 títulos de Grand Slam individuales. Le habría gustado ganar dos más para sobrepasar la marca de la australiana Margaret Court; sin embargo, aseguraba ya en 2018 que con su nuevo rol de madre y esposa sus prioridades han cambiado: “No necesito el dinero, los títulos o el prestigio. Los quiero, pero no los necesito”.