La ducha de sol es una herramienta que ahorra energía y dinero dando acceso de agua caliente a miles de personas.Con el apoyo de su familia, la joven argentina Ana Giménez ganó el concurso “Mentes transformadoras” y se espera que el mes próximo su proyecto “Ducha de Sol” comience a materializarse en los barrios carenciados de la ciudad de Mendoza.
¿Cómo nació este proyecto solidario?
Ana, voluntaria en varias organizaciones que ayudan a personas en situación de vulnerabilidad, se enfrentaba cada semana la dura realidad por la que pasan muchas familias en la Argentina, pero una en particular la impactó profundamente.
Tal y como cuenta en el programa radial La Posta ,. conoció a un chico llamado Andrés que no había terminado la escuela porque solo tenía la ropa que llevaba puesta y no tenía dónde lavarse la cara todos los días, le contó el muchacho.
La joven quedó conmocionada al pensar que en la importancia de una ducha caliente. “El sentirse limpio pueden ser fundamentales para la dignidad de una persona y para ayudarla a salir adelante”.
Ante esta situación Ana y su familia comenzaron a pensar en cómo suplir esta carencia y lograr un cambio positivo. Fue así cómo surgió la idea de diseñar una ducha sostenible y, para ello contó con la ayuda de su padre pues es ingeniero.
“El proyecto busca ser una herramienta de ahorro de energía y de dinero para personas de bajos recursos que no disponen de los medios para acceder a un calentador de agua”.
¿Cómo funciona?
La ducha está fabricada en su gran mayoría con materiales reciclaje y con algunos pocos elementos de bajo coste.
“Si hubiese que comprar todos los componentes calculamos que costaría unos 700 pesos (29 euros /35 dólares) , pero si se pueden conseguir los elementos reciclados se puede armar la ducha por menos de 300 (12 euros /15 dólares)”.L
Funciona con un tanque hecho con dos cubos pegados, a los que se le unen por debajo varias botellas de plásticos en cuyo interior se introduce un lámina de polietileno negro, material que absorbe el calor el sol.
Cuando las botellas se calientan, transfieren la temperatura al agua que se encuentra en el tanque y permite, en unas pocas horas, disponer hasta 40 litros de agua caliente.
La acción solidaria
Con el premio de 400 mil pesos ganados en el concurso, Ana quiere impulsar una acción solidaria en 4 varios de Mendoza y así capacitar a sus vecinos para que construyan sus propias duchas.
Involucrar a las familias, a padres e hijos, cobra sentido por gracias a esta iniciativa lespermitirá comprender que pueden superarse y apostar por buscar nuevas oportunidades para todos.
“No queremos que sea asistencialismo. Queremos enseñarles a hacer el proyecto en lugar de que sea el voluntario el que se los lleve”.
Ana, que estudia para ejercer la abogacía, afirma que es fácil construir esta ducha y que no es necesario contar con un ingeniero para montarla. Por eso invita a todos los que quieran sumarse a su iniciativa a hacerlo a través de la página del proyecto en Facebook y a promoverla donde consideren necesaria.