Hace un par de años, 11 hermanas de origen peruano y de la orden Carmelitas Descalzas llegaron al convento de clausura Cumbres Mayores, edificado en 2014 y ubicado en un pequeño municipio de la provincia andaluza de Huelva, al sur de España.
Sin embargo, nunca imaginaron que su habilidad al coser terminaría llevándolas a confeccionar los atuendos que usan celebridades de la talla de Lady Gaga, Miley Cyrus, Katy Perry y hasta Rihanna.
Todo inició cuando un familiar de María Lemus, directora creativa de la afamada marca María Ke Fisherman, le comentó a la diseñadora sobre la existencia de estas monjitas que eran unas verdaderas maestras con el punto y el ganchillo, tejido que esta firma emplea mucho en sus creaciones.
Enseguida Lemus se vio interesada y llevó diferentes tipos de hilos (más tecnológicos y con mejor ajuste al cuerpo) para ver cómo resultaban las piezas de estas Carmelitas. Se enamoró del resultado; y enseguida les planteó un intercambio donde las hermanas realizan varias de sus piezas mientras ellas les colabora monetariamente para sus diferentes obras de caridad.
Por supuesto, no se sabe qué tanto María Ke Fisherman aporta, pero esperemos que sea mucho, considerando que una pieza de esta firma (que tarda varios días o incluso semanas en hacerse) puede costar entre 500 y 1.300 euros.
Lo más curioso es que estas hermanas, que están en clausura y no cuentan ni siquiera con un radio o una televisión, no tienen ni idea de que sus creaciones han estado en las más destacadas pasarelas; y que a las cantantes más famosas de la actualidad les encanta usar las prendas hechas por ellas y con el diseño moderno (y a veces un tanto atrevido, aunque esto no las ha detenido) de María Lemus y su socio Víctor Alonso.
En su localidad, estas once monjas son superfamosas entre los escasos dos mil habitantes; quienes sólo las ven cuando pueden acercarse al convento a comprarles los dulces que también hacen para sus gastos diarios y beneficencia. Incluso el párroco las elogia porque han logrado que una creación de Cumbres Mayores esté en Estados Unidos y hasta Japón.
Razón tenían nuestras abuelitas de decirnos que la mayoría de las monjas tejen como ángeles; pero quién diría que también lo harían como todas unas expertas en moda.