Comunicado de la Santa Sede ante las imputaciones de abusos a menores al “tesorero del Vaticano”, el cardenal agradece al Papa que le permita ir
La Santa Sede ha hecho público un comunicado en el que muestra que “ha recibido con desagrado la noticia del envío a juicio en Australia del Card. George Pell por imputaciones referidas a hechos ocurridos hace varias décadas”.
Según explican, el Cardenal Pell, “en pleno respeto a las leyes civiles y reconociendo la importancia de participar personalmente en el proceso, de forma que pueda desarrollarse en forma justa y favorecer así la búsqueda de la verdad, ha decidido retornar a su país para afrontar las causas de las que se le acusa”.
Por todo ello, el Papa “le ha concedido un periodo de excedencia para poderse defender”.
Tras esta excedencia, la Santa Sede explica que “la Secretaría para la Economía continuará desarrollando los deberes institucionales que le son propios. Los Secretarios permanecerán en sus cargos para tramitar los asuntos de carácter ordinario, donec aliter provideatur”.
Desde el Vaticano se confía en la defensa del Cardenal Pell y muestran que “ha podido apreciar su honestidad durante los tres años de trabajo en la Curia Romana”.
“La Santa Sede expresa su máximo respeto hacia la justicia australiana, que deberá decidir con respecto a las cuestiones suscitadas”, destaca el Papa que recuerda que “el Cardenal Pell ha condenado desde hace décadas abiertamente y repetidamente los abusos cometidos contra menores como actos inmorales e intolerables; ha cooperado en el pasado con las Autoridades australianas (por ejemplo, en las declaraciones ante la Royal Commission), ha apoyado la creación de la Comisión Pontificia para la Tutela de los Menores y, finalmente, como Obispo diocesano en Australia, ha introducido sistemas y procedimientos para la protección de los menores y para garantizar la asistencia a las víctimas de abusos”.
El cardenal Pell añadía esta mañana, en un comunicado, su agradecimiento al Papa del permiso para ir a Australia a “limpiar su nombre”: “Estoy deseando finalmente tener mi día en el tribunal. Soy inocente de estas acusaciones, son falsas. La sola idea de abuso sexual es aborrecible para mí. He mantenido al Papa Francisco, al Santo Padre, regularmente informado durante estos largos meses, y he hablado con él en varias ocasiones durante la última semana, la última vez creo que hace un día o dos. Hablamos de mi necesidad de tomar permiso para limpiar mi nombre. Así que estoy muy agradecido al Santo Padre por haberme dado esta autorización para regresar a Australia”.