#Notevendas
En abril pasado, el gobierno mexicano aprobó una reforma contra el vientre de alquiler estableciendo límites a la gestación subrogada, entre los cuales determinaba que fuera gratis y que beneficiara sólo a nacionales.
Pero, ¿se ha erradicado así el problema de la utilización del cuerpo de la mujer para fines propios? ¿Hacerla una práctica gratuita lo vuelve más ético? ¿Qué pasa con el vínculo originario del bebé con su madre? ¿Quién es en este caso la verdadera madre de la criatura? ¿Y los derechos de los niños?
Siguen surgiendo dudas y preguntas al respecto de este tema tan polémico.
Son muchas las personalidades a nivel internacional que han levantado la voz para detener esta práctica contraria a la naturaleza humana y contraria a los principios morales y éticos cristianos. Este vídeo nos abre los ojos y permite darnos cuenta de cómo la práctica del vientre de alquiler “cosifica” a las mujeres y las convierte en meros productos de consumo. ¡No! Las mujeres y nuestros vientres no se venden. No somos mercancía.
Y tú, ¿qué piensas?