El Papa: Será difícil llamarla ‘Santa Teresa’. Su santidad es tan cercana a nosotros […]que seguiremos llamándola Madre Teresa”.
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Tras la ceremonia de canonización presidida por el Papa Francisco el domingo 4 de septiembre 2016, “la santa de las alcantarillas“, madre Teresa de Calcuta, está marcando aún más el imaginario colectivo como símbolo auténtico de santidad, ‘casi inalcanzable’ por su radicalidad evangélica.
Pero, la fundadora de las misioneras de la Caridad también fue una niña, una joven y una mujer que buscaba respuestas como todos. Agnes Gonxha Bojaxhiu, la misma que sintió el llamado a los doce años, y una experiencia mística a media edad y que sufriría la noche escura de la ausencia de Dios en su vida, fue un ser que nunca se sintió especial. “Todo lo ha hecho Dios”, decía.
Agnes nació el 26 de agosto de 1910 Skopje, Macedonia, acogida por una devota familia católica de origen albanés, y su corazón fue esculpido por los gestos humildes y concretos de su madre, Drana Bojaxhiu. Una vida normal en los tiempos duros del imperio Otomano.
La niña Agnes veía como su madre se prodigaba por los demás. Una vez, según las fuentes históricas, la mamá de la futura santa invitó a los pobres de su ciudad a cenar con la familia.
En estas fotos, la prueba de que la santa, la madre de los pobres, fue en primer lugar mujer, hecha de carne y hueso y llena de un espíritu altruista alimentado también por sus juegos infantiles con su hermana Aga, la protección de su hermano Lazaro, la relación respetuosa y atenta con su abuela y el dolor de dejar los amigos y su casa por seguir su vocación.
Brian Kolodiejchuck, sacerdote y postulador de la causa de canonización de la santa dijo a la víspera de la canonización que durante el proceso, las autoridades vaticanas pedían, no que se demostrara que fuera una persona perfecta porque no lo era, sino que se documentara la fe, la esperanza y la caridad en la persona de Madre Teresa.
Foto: Agnes Bojaxhiu Gonxhe con su hermana Aga, con el traje tradicional de Macedonia.
Por ello, por su gran humanidad, el Papa Francisco dijo: “Creo que, tal vez, tendremos algunas dificultades para llamarla ‘Santa Teresa’. Su santidad es tan cercana a nosotros, tan tierna y fecunda, que espontáneamente seguiremos llamándola Madre Teresa”. Lo afirmó, durante la homilía del rito de canonización.
En la foto, Agnes Bojaxhiu Gonxhe, futura Madre Teresa de Calcuta (centro), con su hermana Aga (Izq.) y una amiga, pocos días antes de su partida a la Abadía de Loreto en Rathfarnham, Irlanda.
Finalmente, después de esta dos bonitas fotos del pasado juvenil de la Santa, podemos cerrar con la lección de san Juan Pablo II que también nos enseña que la santidad debería impregnar la vida entera:”La vocación del cristiano es la santidad, en todo momento de la vida. En la primavera de la juventud, en la plenitud del verano de la edad madura, y después también en el otoño y en el invierno de la vejez, y por último, en la hora de la muerte”.
Para ver otras fotos de la infancia y la juventud de Madre Teresa recomendamos ir al siguiente enlace. Hacer clic aquí.