“Viernes de la Misericordia”, el Pontífice dedicó sus atenciones a los curas que físicamente no pudieron estar en el jubileo de los sacerdotes
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El papa Francisco visitó dos casas romanas donde viven sacerdotes ancianos o enfermos, quienes impedidos físicamente no pudieron participar en el jubileo de los sacerdotes celebrado hace algunas semanas en el Vaticano (2 y 3 de junio). Los sacerdotes rezaron con el pontífice y recibieron sus palabras de aliento al final de la tarde de este viernes 17 de junio.
La visita hace parte de la iniciativa jubilar: los “Viernes de la Misericordia”. Cada quince días, Francisco realiza una obra de misericordia personal para ser ejemplo para los fieles.
En esta ocasión, el papa Francisco “dedicó toda su atención a los sacerdotes” enfermos y ancianos porque siempre “están presentes en su oración y en su corazón”, indica un comunicado de la Sala de Prensa vaticana.
Justamente en el mes en el que celebró el Jubileo de los sacerdotes, el Obispo de Roma compartió con los presbíteros amplias meditaciones en las Basílicas romanas (el 2 de junio) y celebró con ellos la Eucaristía en la Plaza San Pedro, en la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús (el 3 de junio).
En este contexto, el Pontífice eligió dos comunidades de sacerdotes para llevar consuelo y compartir con ellos el jubileo sacerdotal.
El jefe de prensa de Santa Sede, Federico Lombardi, indicó que “fueron visitas intensas, llenas de encuentros, de emociones de alegría espiritual y momentos de oración”.
En primer lugar, Francisco visitó la “comunidad de Monte Tabor, en donde se encuentran ocho sacerdotes de diferentes diócesis que sufren diferentes formas de trastornos”.
El Papa se reunió con los sacerdotes huéspedes en la pequeña capilla, en donde los escuchó y rezó con ellos.
Sucesivamente, Francisco se trasladó a la comunidad de sacerdotes ancianos y enfermos, que se encuentra en la calle Vergerio 21 de Roma. La casa hospeda a sacerdotes del clero romano que antes fueron párrocos en la diócesis del Papa.
Según la nota del Vaticano, la visita de este viernes “ha sido el sexto signo de misericordia que ha hecho Papa Francisco durante el Jubileo: en enero visitó una casa de reposo para ancianos y enfermos en estado vegetativo”.
Entretanto, en febrero, visitó una comunidad para tóxico dependientes en Castelgandolfo; en marzo (Jueves Santo), el Centro de acogida para refugiados (CARA) de Castelnuovo de Porto; en abril fue la visita a los prófugos y migrantes en la isla de Lesbos; en mayo, la comunidad del “Chicco” para personas con graves discapacidades mentales en Ciampino”.
