El padre Jacques Mourad, de la Iglesia siriaco católica de la diócesis de Homs, sustituyó al jesuita como superior del monasterio Mar Eian
Tres personas enmascaradas secuestraron al padre Jacques Mourad este jueves 21 de mayo a primera hora de la tarde en su monasterio de Mar Elian en Qaryatayn, mientras trabajaba en la organización de la previsible acogida de un flujo de refugiados de Palmira.
Miembro de la comunidad Al Khalil, había sucedido al padre Paolo Dall’Oglio –del que no se tiene noticia desde hace casi dos años- en la dirección del monasterio de Mar Moussa. El padre Jacques Mourad siempre ha actuado en un espíritu de servicio a toda la población, cristiana y musulmana.
Desde Obra de Oriente, el padre Ziad Hilal, jesuita de Homs, explica las circunstancias del drama: “Tras la caída de Palmira, muchos civiles se han dirigido a Qaryatayn, un pequeño pueblo a 30 kilómetros de Homs, y sobre todo al monasterio de Mar Elian, donde el padre Jacques Mourad había empezado a organizar la acogida de familias desplazadas”.
“En ese momento, tres hombres encapuchados lo secuestraron, junto a un cristiano de 37 años de edad originario de Alepo, Boutros –prosigue-. Los han llevado a un lugar desconocido en su propio coche y no tenemos ninguna noticia, lo que resulta muy inquietante para la comunidad cristiana”.
Trabajando en colaboración con el padre Jacques Mourad, estaban en contacto con él unas horas antes: “Cuando le propuse dejar un tiempo Qaryatyan con la aproximación de Daesh, me respondió que como sacerdote y pastor nunca saldría del lugar mientras hubiera gente, salvo si les expulsaban”, confía el padre Ziad.