Mientras sus compañeros festejaban, al final del partido Cavani fue a consolar a uno de los rivales
Mientras todos sus compañeros de la selección festejaban en medio del campo la clasificación de Uruguay, Edinson Cavani se dirigió hacia la banca de Italia y consoló a uno de los rivales. Caricias, abrazos, apretón de manos. Luego el intercambio de camiseta con Ciro Immobile.
Edinson Cavani pertenece a una asociación cristiana evangélica de deportistas de élite, Atletas de Cristo, fundada en la década de los 80 por dos futbolistas brasileños, y a la que pertenecen entre otros el español Juan Carlos Valerón y el brasileño Kaká.
Testimonio público
Un gran gesto para el Atleta de Cristo que había declarado cuando era jugador del Nápoles “Considero un privilegio poder utilizar mi popularidad de futbolista para dar testimonio de mi fe públicamente y con notable resonancia mediática”. Edinson Cavani nunca ha escondido las razones de su madurez personal y profesional “¿Mi secreto? Creer en Dios como guía de mi vida. Él es mi fe y mi recurso”.
Amante del séptimo día
Edinson ama la vida de comunidad y pasó el año nuevo de 2011 en compañía de sus compañeros en Castel Volturno, precisamente donde se entrenaba con el Nápoles. Ha llamado a uno de sus hijos Bautista y apenas llegó al Nápoles pidió a Lavezzi cederle la camiseta número 7. Ninguna otra vestimenta de estrella, ninguna voluntad de emular a algún ídolo de la infancia, la cifra en cuestión tiene un claro valor simbólico, no es por casualidad que el uruguayo llevara el 7 también en Palermo.
Vida, fútbol y fe
“Abrir el corazón y seguir las enseñanzas de Jesucristo, vuestra existencia cambiará para mejor” es el mensaje de evangelización de los Atletas de Cristo. Y el jugador uruguayo lo repite todos los días, además de dar testimonio en las 86 páginas que dan forma a su libro “Lo que llevo en el corazón – Vida, fútbol y fe”: una autobiografía que dice mucho del hombre antes que del futbolista.