Priyanka Bairwa se negó a un matrimonio concertado temprano. Junto con otras niñas que podrían convertirse en esposas antes de la mayoría de edad, pide acceso gratuito a la educación
En la India, una ley de 2006 prohíbe y castiga los matrimonios entre adultos y menores, a pesar de esto los casos de niñas casadas todavía están muy extendidos. La pandemia ha agravado la situación, pero hay notables excepciones.
La historia de Priyanka Bairwa es especialmente alentadora para las niñas que viven en las zonas más pobres y rurales de la India.
No al matrimonio concertado
“Durante la pandemia, todas las familias del pueblo estaban ansiosas por casar a sus hijas: si tuvieran que invitar a menos personas, los gastos habrían sido mucho menores. Pero me negué a convertirme en una novia infantil. Hubo un fuerte contraste, los enfrentamientos fueron continuos en la familia. Finalmente los amenacé con escapar y ellos, temiendo que hiciera algo imprudente, cancelaron el matrimonio. Entonces mi madre convenció al resto de mis familiares para que me dejaran estudiar y me inscribí en la universidad”.
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