El periódico La Prensa de Nicaragua, el principal diario opositor que ha resistido durante mucho tiempo los embates del sandinismo encabezado por el presidente Daniel Ortega, escribía en su cabezal del pasado jueves 16 de abril: “Ortega reaparece sin plan ante pandemia”.
Y es que después de 34 días de ausencia pública –tiempo en el cual se especuló incluso sobre la posibilidad de su muerte— Ortega compareció por 25 minutos ante sus seguidores en las cámaras de la televisión oficial.
El objetivo de esta comparecencia no fue trazar un rumbo de la nación ante la pandemia del coronavirus, que azota a todo el continente y que acaba de registrar su segunda persona muerta en Nicaragua, sino mostrar que seguía vivo y al mando del gobierno.
Sin embargo, se especula que también fue para garantizar la vigencia en el mando del sandinismo frente al segundo aniversario de las protestas populares de este sábado 18 de abril.
Desde bombas atómicas a señales divinas
El gobierno sandinista no ha tomado ninguna medida de mitigación ante el posible contagio masivo, ni ha hecho pruebas o prevenido a la gente acerca de la necesidad del distanciamiento social o de quedarse en casa para evitar contagiarse o contagiar.
Lejos de ello, en la pasada Semana Santa, el propio gobierno organizó viajes pagados a las playas, fiestas en ríos y lagunas y algunas procesiones que, según denuncias públicas, fueron encabezadas por falsos sacerdotes.
En lugar de referir algún plan para enfrentar lo inevitable –según el Centro de Coordinación para la Prevención de los Desastres en Centroamérica y República Dominicana hay ya 10.000 personas infectadas en la zona—Ortega habló de bombas atómicas y señales divinas.
Tomar medidas por parte de la gente
Nicaragua es el único país en la zona cuyo gobierno no ha adoptado medidas severas de confinamiento pues asegura que solamente hubo nueve casos en un mes. Por su parte, los especialistas, según La Prensa, advirtieron a la población que el contagio se elevará en mayo, por lo cual la población deberá tomar sus propias medidas y quedarse en casa.
En este contexto cabe destacar la campaña iniciada por Adriana Paniagua, Miss Nicaragua 2018, para recaudar dinero y enfrentar la pandemia al margen de la versión oficial. Y músicos como Carlos Mejía Godoy, Katia Cardenal y William Calderón han realizado un concierto virtual animando a la población a quedarse en casa.
“Estos tiempos son duros, son tiempos de incertidumbre y son tiempos de virus”, escribió Paniagua en su cuenta de Instagram, refiriéndose tanto a la conmemoración del segundo aniversario de las protestas populares que comenzaron el 18 de abril de 2018, como a la presencia del potencial mortífero del COVID-19.
Doble epidemia
La Miss Nicaragua 2018 lanzó un mensaje al pueblo nicaragüense: “Es importante tomar las cosas en serio y saber que este virus es real”, opinión que, hasta ahora, no comparte el régimen sandinista.
Tanto así que hasta Costa Rica, vecino de Nicaragua y con una tradición pacifista bien ganada en la región, envió fuerzas militares a la frontera ante la preocupación por la falta de medidas que ha caracterizado la respuesta de Ortega.
Los cruces fronterizos entre Nicaragua y Costa Rica llevan casi un mes cerrados y suspendida toda vía de escape de miles de nicaragüenses perseguidos por el régimen de Ortega (77.000 nicaragüenses han pedido asilo desde 2018); perseguidos que hoy enfrentan la furia del oficialismo y la letalidad del coronavirus.
