El Papa Francisco recibió en audiencia en el Aula Pablo VI en el Vaticano a los participantes a un curso de formación de la Rota Romana sobre el nuevo proceso matrimonial y el proceso super rato este sábado 12 de marzo.
“La Iglesia es madre y quiere demostrar a todos el rostro de Dios fiel a su amor, misericordioso y siempre capaz de volver a donar fuerza y esperanza. Lo que más nos preocupa en relación a los separados que viven una nueva unión es su participación a la comunidad eclesial”, dijo.
Asimismo, el Papa reiteró la admiración por los matrimonios que resisten a la tempestad.
“Pero mientras, nos ocupamos de curar las heridas de los que piden un examen de la verdad sobre su matrimonio fallido, miremos con admiración a los que, también en condiciones difíciles, permanecen fieles al vinculo sacramental”, sostuvo.
El Papa sustentó que estos matrimonios fieles deben ser señalados como un ejemplo a imitar. “Tantas mujeres y hombres soportan cosas difíciles, grandes para no destruir la familia, por ser fieles en la salud, y en la enfermedad, en la dificultad y en la vida tranquila: es la fidelidad. Y son bravos!
Así, invitó a los operadores de los Tribunales eclesiales a vivir su labor como un servicio y no como un poder, además de mantener una atención especial por las personas heridas.
Nulidad matrimonial
Por otro lado, el Pontífice recordó que durante el camino sinodal sobre la familia surgieron “fuertes expectativas” para hacer más “ágil y eficaz” los procedimientos de nulidad matrimonial.
En otro momento, recordó algunas de las novedades. En especial, se refirió al tema de la simplificación y el acceso a “las estructuras jurídicas eclesiales”.
“En efecto, tantos fieles sufren por el fin del propio matrimonio” y muchas veces son oprimido por la duda si éste fue valido o no”, añadió.
La persona al centro
“La caridad y la misericordia, además que la reflexión sobre la experiencia, han empujado la Iglesia a estar aún más cerca de estos sus hijos, acercándose a su legitimo y deseo de justicia”, expresó Francisco.
Después de un año de trabajo, una comisión ha estudiado con “objetivo pastoral”, la forma en que la Iglesia puede responder con una rápida revisión de “la situación matrimonial” de dichos fieles.
Por ello, en su discurso recorrió los cambios actuales en materia matrimonial, iniciados el 15 de agosto de 2015, con la promulgación de los documentos: Mitis Iudex Dominus Iesus y Mitis et Misericors Iesus, los cuales son producto del trabajo de una comisión especial instituida el 27 de agosto 2014.
Obispo juez y proceso breve
Así, subrayó que fue abolida la doble sentencia conforme y se inició el llamado “proceso breve”. Un papel central en esta reforma lo tienen el Obispo diocesano, o el Eparca en las iglesias orientales, como jueces de las causas.
De igual manera, los obispos además del acertamiento por vía administrativa – rato y no consumado – les espera la responsabilidad de la vía judiciaria para verificar la validad del vínculo.
Espíritu de los cambios en los Tribunales
En este sentido, aseguró que es importante que los operadores de los Tribunales eclesiásticos compartan el espíritu de las reformas en materia matrimonial para “dar un servicio de justicia y caridad a las familias”.
“Para tanta gente que ha vivido una experiencia matrimonial infeliz, la verificación de la validad o no del matrimonio representa una importante posibilidad; y estas personas van ayudadas a recorrer lo más cómodamente posible este camino”, remarcó.
Hoy celebramos a...