1 / 8
Alejarse del hogar y romper con el amor que ha rodeado a una persona puede llegar a ser muy doloroso para la familia. Decir adiós, darse la vuelta y no volver... Dios mío: mira mi abandono, mi vacío y el miedo que siento por el destino de quien dejó a nuestra Madre Iglesia.
+

© graphicmaker|Shutterstock