Betsabé: 2 Samuel 11,1-27 ; 12,1-25. 1 Reyes 1,1-31. Casada con Urías el hitita, oficial del ejército del rey David, Betsabé es observada por este último mientras se da un baño. David, seducido por ella, la recibe en su casa aunque sabe que está casada con Urías. Betsabé se queda embaraza tras esta unión adúltera. Cuando David se entera, intenta ocultarlo enviando a Urías a dormir en casa con su mujer, pero este decide no abandonar a los soldados. Para librarse de él, David lo arregla para que muera en combate. Una vez Urías muere, David se casa con Betsabé. Yahvé envía al profeta Natán para comunicarle que lo que había hecho era digno de muerte. Por tanto, Natán anuncia a David: “Jehová ha remitido tu pecado; no morirás. Mas por cuanto con este asunto hiciste blasfemar a los enemigos de Jehová, el hijo que te ha nacido ciertamente morirá” (2 Samuel 12,13-14). El niño enseguida cae enfermo y muere al séptimo día, a pesar del ayuno de David. Finalmente, Betsabé trae al mundo otro niño, Salomón, que será rey de Israel. En el primer Libro de los Reyes, la bella Betsabé y el profeta Natán insisten ante el viejo rey David para que Salomón le suceda en el trono de Israel, a pesar de su rango entre los niños del reino. Paolo Véronèse, Betsabé en su baño, 1575, museo de Bellas Artes de Lyon.
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