9 / 11
San Juan María Vianney
San Juan María Vianney se dirigió, entre la multitud, a una mujer que había ido a verlo en Ars para saber de su marido. La señora había tenido un sobresalto, y Vianney repitió: “Está a salvo”. Luego añadió: «Le digo que está a salvo, se encuentra en el Purgatorio, y se debe rezar por él. Entre el parapete del puente y el agua tuvo tiempo de hacer un acto de contrición. La santísima Virgen le obtuvo esa gracia (...). A veces su esposo, se ha unido a su oración y esto ha merecido el perdón».
+

© Public domain