MIRMANDE (Drôme): Escondidas detrás de las murallas y entrelazadas en un laberinto de callejones, las casas de Mirmande han conservado sus bellas fachadas de piedra y sus antiguas puertas. El pueblo tiene dos iglesias: Sainte-Foy, construida en la época medieval, aunque ahora alberga exposiciones de artistas. En la parte baja del pueblo, la iglesia más reciente de Saint-Pierre sigue en funcionamiento.
+ © Béa