4 / 12
Ser condescendiente.
No hablemos en términos absolutos. “¡Nunca me escuchas!” Bueno, no será para tanto, alguna vez nos habrá escuchado, digo yo. “Delete the drama”. No es necesario dramatizar. Explicar la acción que nos molesta, no criticar al sujeto. “Pienso que hablar mal de los demás no es bueno” no es lo mismo que decir “eres un/a cotilla”.
+

© GaudiLab | Shutterstock