Modisto, creador, diseñador,
Jean-Charles de Castelbajac conjuga con originalidad todas las artes en sus obras. Su inspiración viene a menudo de su educación católica. Diseñó ángeles para las paredes parisinas, creó las casullas del papa Juan Pablo II para la JMJ de París en 1997… En 2011, creó un conjunto para la Virgen María en el contexto de la exposición Icône de mode en el Museo de los Tejidos de Lyon, dedicada a la historia de la vestimenta de la Virgen María y erigida para la ocasión en icono de moda. Las creaciones de este gran artista evocan a menudo la oración. Fiel a su deseo de permanecer “ligado a lo sagrado”, confesó al diario La Croix que “una parte de su inspiración viene en particular de la simbología de los colores en lo sacro”.