Confiar en hacer orden un día de vez en cuando.
Vamos dejando los libros, revistas y papeles de trabajo en cualquier lugar, con la excusa que "ya haremos orden un día". O en nuestra habitación comenzamos a mezclar calcetines con ropa interior y camisetas con chaquetas. O comenzamos a crear un espacio de "varios". Mmm... no. Si pones cada objeto en su sitio nada más terminar, ganarás esas 24 horas del famoso "día del orden descomunal" para hacer otras cosas mucho más interesantes. Lo mismo ocurre en la cocina, si no ponemos cada cacharro y cada bote en su sitio después de usarlo. A veces se requiere una pequeña escalera para llegar a colocar los instrumentos en el lugar apropiado. Un truco que puede ayudarte: ten todo más a mano, aprovechando espacios como el interior del horno, para guardar bandejas, por ejemplo.
+© Maa Hoo | Stocksy United