Aparta los miedos al futuro
Muchas veces la ansiedad está generada por el miedo a algo que todavía no se ha producido. Tememos quedarnos sin trabajo, no poder cumplir con las expectativas de la pareja o nos hace sufrir el futuro de los hijos. Pero ese sufrimiento no bien gestionado, en vez de hacernos prudentes y encarar el futuro con fortaleza, nos bloquea y nos impide avanzar.
En este aspecto, es mejor que controlemos el miedo para que no juegue en contra.
Para ello, céntrate en la vida real, en los datos que tienes en mano y no permitas que la imaginación te obsesione con algo que no ha sucedido ni tal vez vaya a producirse.
Ceñirse a los hechos es la mejor opción.
Si es necesario, y si te cuesta dejar de tener miedo al futuro, pon por escrito lo que te inquieta. Una vez escrito, lee y tacha lo que no sea real.
+© Shutterstock