7. La pintura ha tenido otros momentos esplendorosos. Uno de ellos ocurrió el 30 de julio de 1588 cuando «se iluminó de manera milagrosa y pudo ser admirada por toda la población de Chiquinquirá». Dos semanas después el «extraordinario y sobrenatural prodigio» se repitió delante del arzobispo de Santa Fe, Luis Zapata de Córdoba, y numerosos fieles.
+© Facebook @BasilicaChiquinquira