Para recibir el perdón de Dios
Una gran tentación hace que pensemos: "Me alejé de Dios y ya no puedo hacer nada por remediar la situación", "mi situación ya no tiene vuelta, así que no vale la pena que me acerque a la Iglesia".
Dios no piensa en los mismos términos que nosotros. Es Amor (con mayúsculas) y, como el padre del hijo pródigo, siempre está esperándonos, dispuesto a perdonarnos y hacer una gran celebración por nuestro regreso. Jesucristo instituyó el sacramento de la Penitencia, que es el sacramento del Perdón, para remediar esa situación de alejamiento que forma parte de nuestra condición pecadora.
No importa que estés lejos, Dios siempre cuenta con tu regreso a la Iglesia. El sacramento de la Reconciliación nos da la gracia para volver a caminar como hijos de Dios. Recuerda que no existe pecado que Dios no pueda perdonarte si hay arrepentimiento sincero. La Iglesia es madre y te acogerá siempre, no dejes que los prejuicios sean un obstáculo para lo que más te importa, que es llegar al cielo.
+© Sebastien Desarmaux | Godong