Aleteia logoAleteia logoAleteia
jueves 28 marzo |
San Cástor de Tarso - Jueves Santo
Aleteia logo

Un día descubrí el Poder de la Oración (Un testimonio bellísimo)

Holy Sepulchre

GALI TIBBON / AFP

A pilgrim prays outside the closed gate of the Church of the Holy Sepulchre in Jerusalem's Old City.

Claudio de Castro - publicado el 27/03/18

La Cuaresma está llegando a su fin.
No olvides a Aleteia en tu ofrenda cuaresmal
para que brille la esperanza cristiana.
¡Apoya a Aleteia!

 

DONE AHORA

«Por aquellos días fue Jesús a la montaña a orar, y pasó la noche orando a Dios.» (Lucas 6, 12)

Jesús pasaba noches enteras en oración, ante la presencia de su Padre.  ¿Por qué era tan importante para Él?

El mundo tiene gran necesidad de nuestras oraciones.

“Rezad, rezad mucho y haced sacrificios por los pecadores, pues muchas almas van al infierno porque no hay quien se sacrifique y pida por ellas”, les pidió la Virgen Santísima a Francisco, Jacinta y Lucía en sus apariciones de Fátima.

Conocía el Poder de la oración, por los muchos testimonios que me llegaban. Sabía que Dios escucha siempre y que cuando rezamos con fe, la oración le es grata y nos atiende.

A Jesús le agradaba estar en la presencia de su Padre, en oración. Y se marchaba a lugares solitarios.

«Su fama se extendía cada vez más y una numerosa multitud afluía para oírle y ser curados de sus enfermedades. Pero él se retiraba a los lugares solitarios, donde oraba.» (Lucas 5, 15-16)

Una mañana me di cuenta de lo poco que oraba. Mi oración era vacía, sin sentido. Mi señal de la cruz era un garabato. Sentí que debía orar. Aprender a orar. ¿Pero cómo hacerlo?

En aquellos días solía pensar que la oración era el lenguaje de Dios. No importaba en que idioma rezaras, Él siempre comprendería y te estaría escuchando. Reflexioné mucho en ello.  Me sorprendía ver a los monjes orantes, a las religiosas de clausura y me decía: “Sus oraciones sostienen al mundo”.

Me preguntaba por qué parecía que orar era parte indispensable de sus vidas. Rezaban con una facilidad asombrosa. Se sumergían en la oración en un instante. La santa Biblia tenía incluso promesas a aquellos que oraban con fervor.

«No os inquietéis por cosa alguna; antes bien, en toda ocasión, presentad a Dios vuestras peticiones, mediante la oración y la súplica, acompañadas de la acción de gracias. Y la paz de Dios, que supera todo conocimiento, custodiará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.» (Filipenses 4, 6-7)

Me parecía maravilloso. Pero aún no encontraba el verdadero sentido a la oración.

Un buen día noté en misa a una persona que se destacaba por su fervor. La misa concluyó y se quedó allí, mientras todos nos marchábamos, dando gracias a Dios.

Ese día comprendí: “Rezar es estar en la presencia de Dios”.

Y me di cuenta que mientras estuviera en su presencia amorosa, todo estaría bien.

……………

Sentí la necesidad de compartir estas maravillosas experiencias que descubría cada día,  y me senté a escribir un libro donde relataba mis vivencias, mi búsqueda y encuentro con la oración.

Te invito a leerlo. Puedes acceder a él en estos enlaces:

LATINOAMERICANA Y ESTADOS UNIDOS

MÉXICO

ESPAÑA

Libro el Poder de la Oración de Claudio de Castro

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.

ES_NEW.gif
Oración del día
Hoy celebramos a...




Top 10
Ver más