Aleteia logoAleteia logoAleteia
viernes 19 abril |
San Francisco Solano
Aleteia logo

Qué indigno soy, de comulgar. (Un fuerte testimonio)

eucaristia.png

Guitta Maroun

Claudio de Castro - publicado el 22/05/20

Pronto abrirán las iglesias y volveremos a Misa y a recibir a nuestro amado Señor. He pensado mucho en ello. Tantas comuniones espirituales y mi alma tienen sed de Dios. Lo recibo espiritualmente, y me lleno de su amor infinito, pero anhelo recibir la hostia consagrada, y que inunde todo mi ser con su AMOR.

Leí en una ocasión lo efectivas que son las comuniones espiritualescuando no puedes recibir a Jesús sacramentalmente. Y he pasado saciando mi anhelo de Dios, con ellas. Haciendolas a lo largo del día.

Creo, Jesús mío,
que estás real
y verdaderamente en el cielo
y en el Santísimo Sacramento del Altar.

Os amo sobre todas las cosas
y deseo vivamente recibirte
dentro de mi alma,
pero no pudiendo hacerlo
ahora sacramentalmente,
venid al menos
espiritualmente a mi corazón.
Y como si ya os hubiese recibido,
os abrazo y me uno del todo a Ti.

Señor, no permitas que jamás me aparte de Ti. Amén.

Y aun así sueño con el momento, único, irrepetible, de la sagrada comunión.

Me ha pasado algo curioso.  Como te contaba, suelo rezar el Rosario cada mañana con mi esposa Vida. Caminamos y así hacemos algo de ejercicio mientras rezamos. El otro día, mientras estábamos por el tercer misterio, empecé a ver mis pecados, aquellos con los que he ofendido a Dios, muchos que había olvidado y por ello no los confesé ante aun sacerdote.

Recordé que en tiempos de Pandemia cuando no puedes tener cerca un sacerdote para confesarte, para que Dios te perdone y olvide esos pecados, basta un arrepentimiento sincero, una “perfecta contrición”, y el propósito de confesarte tan pronto sea posible. Y fue lo que hice.

Que indigno me siento de comulgar. Y aún así Jesús nos llama a recibirlo.

He pasado con este pensamiento de san Josemaría Escrivá rondando mi cabeza:

“¿Has pensado en alguna ocasión cómo te prepararías para recibir al Señor, si se pudiera comulgar una sola vez en la vida?” 

Yo sí lo he pensado y mucho, en esta cuarentena. Así me siento. Y me preparo en esta larga cuarentena para ese maravilloso momento en que pueda volver a recibirlo en la sagrada comunión.

Me siento como si estuviera anhelando recibirlo la anoche previa a mi Primera Comunión, cuando recé mucho y le dije que lo quería y me ilusionaba estar con Él.

Ahora te hago la pregunta de san Josemaría:

¿Cómo te prepararías para recibir al Señor, si se pudiera comulgar una sola vez en la vida?”

Cuando vuelvas a comulgar, hazlo con el alma limpia, el corazón ilusionado y el propósito de amar cada día más al buen Jesús.Y dile una y otra vez: “Jesús te amo”.

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.

ES_NEW.gif
Oración del día
Hoy celebramos a...




Top 10
Ver más