Celebrando el sexagésimo aniversario de la declaración Nostra Aetate sobre la relación de la Iglesia con otras religiones, el Papa León XIV deseó unidad y compromiso del mundo religioso con la paz y “la humanización de la tecnología” durante su Audiencia General.
La Plaza de San Pedro se llenó de nuevo para la tradicional audiencia general de los miércoles por la mañana. Tras un largo recorrido en el papamóvil por las naves, bendiciendo a decenas de bebés y saludando a la multitud que lo aclamaba, el nuevo papa decidió dedicar su catequesis al aniversario de Nostra Aetate, una declaración histórica promulgada en el Concilio Vaticano II que revolucionó las relaciones de la Iglesia católica con las religiones no cristianas, en particular el judaísmo.
"No debemos olvidar que la primera orientación de Nostra Aetate fue hacia el mundo judío", explicó León XIV. "Por primera vez en la historia de la Iglesia, iba a tomar forma un tratado doctrinal sobre las raíces judías del cristianismo" y representar "un punto de no retorno".
Haciéndose eco de las palabras de la declaración más breve del Concilio Vaticano II, recordó que la Iglesia, "consciente de la herencia que comparte con los judíos", deplora "el odio, la persecución y todas las manifestaciones de antisemitismo dirigidas contra los judíos". Señaló que todos sus predecesores habían condenado este flagelo con claridad. "Por lo tanto, reafirmo también que la Iglesia no tolera el antisemitismo y que lo combate, por el Evangelio mismo".

Sin aludir directamente a las políticas del gobierno israelí en Gaza desde la masacre de Hamás del 7 de octubre y sus repercusiones en la opinión pública mundial, el Papa afirmó que no debemos "permitir que las circunstancias políticas y las injusticias de algunos nos aparten de la amistad". En Francia, el número de actos antisemitas ha aumentado drásticamente desde el 7 de octubre de 2023. En enero del año pasado, el Consejo Representativo de Instituciones Judías de Francia (CRIF) informó que se habían registrado 1.570 actos antisemitas en 2024, unos 1.676 en 2023, pero solo 436 en 2022.
Religiones unidas por el "desarrollo responsable de la IA"
En la segunda parte de su catequesis, y ante numerosos representantes religiosos que habían acudido a Roma para celebrar Nostra Aetate, el Papa reiteró que "todas las religiones pueden reflejar un rayo de verdad que ilumina a todos los hombres". Renovó la invitación de la Iglesia a todos los católicos a un compromiso sincero con el diálogo y la colaboración con los fieles de otras religiones.
"Nostra Aetate nos recuerda que el verdadero diálogo está arraigado en el amor, único fundamento de la paz, la justicia y la reconciliación, al tiempo que rechaza firmemente toda forma de discriminación o persecución, afirmando la igual dignidad de todo ser humano", subrayó.
Al denunciar el "fundamentalismo y el extremismo religioso", el Papa también abogó por el "desarrollo responsable de la inteligencia artificial". Advirtió que "si se concibe como una alternativa a los seres humanos, puede violar gravemente su dignidad infinita y neutralizar sus responsabilidades fundamentales".
Para el Papa, las religiones y sus tradiciones tienen "una inmensa contribución que hacer a la humanización de la tecnología". Deben ser capaces de "inspirar su regulación, con el fin de proteger los derechos humanos fundamentales".
Una intensa secuencia interreligiosa
León XIV concluyó su enseñanza invitando a todos a una "oración silenciosa". En las escaleras de la Basílica de San Pedro se encontraban representantes de los mundos judío, musulmán y budista.
Ayer, el Papa participó en dos importantes eventos interreligiosos. Cerca del Coliseo, declaró ante decenas de líderes religiosos que "todos los creyentes son hermanos y hermanas" y que "la guerra nunca es santa". En una vigilia celebrada en el Vaticano con 3.000 participantes, afirmó que "el diálogo no es una táctica ni una herramienta, sino un modo de vida, un camino del corazón".










