separateurCreated with Sketch.

(VIDEO) Castel Gandolfo: ¿cómo comenzó la tradición papal del verano?

whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Fátima Navarro - publicado el 09/07/25
whatsappfacebooktwitter-xemailnative
Cada verano se acostumbra que los papas viajan a Castel Gandolfo, cerca de Roma, donde pasan algunas semanas de descanso y retiro espiritual

El Papa León XIV se trasladó al Castel Gandolfo este domingo 6 de julio, donde permanecerá hasta el domingo 20 del mismo mes. Este lugar, situado en las afueras de Roma, ha sido históricamente la residencia de verano de los papas. Pero, ¿conoces cómo comenzó esta tradición y qué tiene de especial este lugar?

Castel Gandolfo es un pintoresco pueblo ubicado en las colinas de los Montes Albanos, a unos 25 kilómetros al sureste de Roma, con vistas al lago Albano. Esta tradición comenzó en el siglo XVII. En el siguiente video te mostramos cómo se originó y cómo ha perdurado a lo largo del tiempo.

¿Te ha gustado leer este artículo? ¿Deseas leer más?

Recibe Aleteia cada día.

Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.