León XIV visita la emisora ​​de la radio del Vaticano

Al llegar al lugar por la mañana, el Papa visitó primero las instalaciones del centro de onda corta de Radio Vaticano, inaugurado en 1957 por Pío XII, incluyendo la sala de transmisión. También conversó con el personal y se interesó por el funcionamiento de las antenas, las transmisiones y el sistema de respaldo digital en caso de incidente. La antena principal del complejo tiene forma de cruz.

Antes de bendecir a los empleados movilizados en esta solemnidad del Corpus Christi —día festivo en el Vaticano—, León XIV celebró con ellos el 43.º aniversario de su ordenación sacerdotal con un refrigerio. Fue ordenado sacerdote el 19 de junio de 1982 en la Capilla de Santa Mónica, situada frente al Palacio del Santo Oficio, donde reside actualmente.

Durante su visita, León XIV enfatizó el valor misionero de las comunicaciones vaticanas. Subrayó lo valiosa que había sido para él la transmisión de onda corta de Radio Vaticano durante sus viajes a regiones remotas de Latinoamérica y África. La onda corta, también conocida como "ondas de alta frecuencia", permite la transmisión de radio a largas distancias. Como parte de la reforma de las comunicaciones iniciada por el Papa Francisco en 2015, se consideró en un momento dado la eliminación de la transmisión de onda corta.

El pontífice visitó luego el resto del área extraterritorial, cedida al Vaticano por Italia en 1951. En mayo de 2024, sobre la base del motu proprio Fratello Sole, el Papa Francisco había decidido desarrollar una planta de energía solar en estas 424 hectáreas actualmente dedicadas a la agricultura, capaz de alimentar no solo a la estación de radio, sino también a toda la Ciudad del Vaticano.

Este proyecto, dirigido por la Hermana Raffaela Petrini, Presidenta de la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, y el Arzobispo Giordano Picinotti, Presidente de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica, se inspira en la encíclica Laudato si' (2015) sobre ecología integral. También busca cumplir con los compromisos adquiridos en virtud de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, a la que la Santa Sede se adhirió en 2022. Se trataría de una "instalación agrovoltaica", es decir, un campo de paneles solares bajo el cual se mantendría la actividad agrícola.