El Papa León XIV nombra a su primer obispo en China

Este anuncio se produce tras dos nombramientos unilaterales de obispos por parte de China durante el periodo de la Sede Vacante, entre el fallecimiento del Papa Francisco y la elección de León XIV. El 28 de abril, el padre Wu Jianlin, vicario general de la diócesis de Shanghái, fue elegido obispo auxiliar de la misma diócesis. Al día siguiente, el padre Li Jianlin fue elegido obispo de la diócesis de Xinxiang.

Estas dos elecciones, hechas públicas a principios de mayo, parecieron contravenir el acuerdo provisional sobre el nombramiento de obispos, firmado entre la Santa Sede y la República Popular China en 2018. Este acuerdo se ha renovado varias veces, la más reciente en 2024 por un periodo de cuatro años. Aunque sus términos son confidenciales, en teoría establece que el Papa tiene la última palabra en el nombramiento de obispos en China.

Después de 2018, los nombramientos episcopales en China siempre habían respetado los términos de este acuerdo hasta el nombramiento unilateral del obispo Joseph Shen Bin como obispo de Shanghái en abril de 2023. Desde 2022, preside la Asociación Patriótica China, el organismo oficial de la Iglesia Católica en China, que funciona como conferencia episcopal, pero no está reconocido por Roma. Su nombramiento se regularizó en julio de 2023, después de que la Santa Sede expresara públicamente su sorpresa y decepción.

Tras los dos nombramientos unilaterales del pasado abril, la Santa Sede no había reaccionado. El comunicado que anunciaba el nombramiento del arzobispo Lin Yuntuan parece indicar que, en esta ocasión, la Santa Sede inició el proceso, que China aceptó.

Cabe destacar que este es el primer nombramiento de un obispo auxiliar bajo el acuerdo de 2018; los trece anteriores fueron para obispos titulares. Esto podría explicar el formato inusual de este nombramiento. De hecho, los procedimientos que rigen el nombramiento de obispos auxiliares se desconocen en China. En otros países, estos procedimientos pueden variar. En Francia, por ejemplo, la Santa Sede no consulta al Estado sobre el nombramiento de obispos auxiliares, a diferencia del de obispos titulares.

El obispo Joseph Lin Yuntuan, de 73 años, es originario de Fuqing, una importante ciudad de la provincia de Fujian, a 50 km al sur de su nueva diócesis, Fuzhou, donde cursó el seminario. Esta región tiene una larga tradición católica: el primer obispo de la región, el obispo François Pallu, miembro de las Misiones Extranjeras de París, fue nombrado allí en 1680. La diócesis de Fuzhou es hoy una de las más grandes de China, con casi 300 mil fieles.

Ordenado sacerdote en 1984, el obispo Lin Yuntuan fue párroco de varias parroquias de su diócesis hasta 2002. Posteriormente, se convirtió en administrador diocesano después de que el obispo titular, el obispo John Yang Shudao —miembro, como él, de la "Iglesia clandestina", reconocida por Roma pero no por Pekín—, pasara dos periodos en prisión en 2001. Durante mucho tiempo fue la mano derecha del administrador apostólico de la diócesis, y el propio padre Yuntuan ejerció esta función de 2013 a 2017, antes de ser ordenado obispo con el consentimiento de Roma, sin estar asignado a ninguna diócesis.

En 2019, dirigió a un grupo de 100 sacerdotes que decidieron unirse a la Asociación Patriótica, de acuerdo con los términos del acuerdo de 2018, que prevé la integración gradual de los miembros de la Iglesia clandestina en la asociación controlada por el Partido Comunista Chino. En enero pasado, el obispo Joseph Cai Bingrui, miembro de la Asociación Patriótica cuya ordenación episcopal había sido reconocida por Benedicto XVI, fue nombrado arzobispo de Fuzhou por el Papa Francisco.