Las virtudes de las violetas maristas son un símbolo fundamental en la espiritualidad y pedagogía de san Marcelino Champagnat, fundador de los Hermanos Maristas. Estas virtudes reflejan su visión de un discipulado cristiano auténtico y cercano, inspirado en la figura de María y en la vida cotidiana.
Estas tres virtudes no son solo comportamientos externos, sino actitudes espirituales profundas que guían la vida marista. Marcelino eligió las violetas como símbolo porque son flores pequeñas y discretas, pero llenas de belleza y significado. Así, los maristas buscan reflejar estas virtudes en su vida diaria, acercándose a los demás con respeto, autenticidad y servicio.
Descubre en el siguiente video el significado de cada una de ellas.

