En un contundente llamamiento publicado por Vatican News , el padre Ibrahim Faltas, Vicario de la Custodia de Tierra Santa, condenó la violencia en curso en Gaza, centrándose en su devastador impacto en la infancia. Su mensaje se produce tras la muerte de nueve hermanos en un ataque aéreo israelí, dejando a un solo niño, Adam, como el único superviviente.
Según el padre Faltas, los niños estaban en casa con su padre, Hamdi, cuando el edificio fue alcanzado por dos misiles. Nueve niños murieron. Adam y su padre fueron rescatados de los escombros con vida, pero en estado crítico. Su madre, Alaa, pediatra de guardia en el Complejo Médico Nasser de Khan Younis, los recibió en el hospital. Ambos padres son profesionales de la salud que han pasado meses tratando a niños heridos en medio de la escasez de recursos propios de la guerra.
La intervención del sacerdote, titulada "Los niños y bebés de Gaza no son el enemigo", se publicó el 26 de mayo en varios idiomas. Incluye un relato de primera mano del ataque y cuestiona el razonamiento moral detrás de los ataques contra viviendas y escuelas civiles.
“La edad más hermosa y verdadera de la vida se está manchando con la inmoralidad de la violencia y el absurdo del odio”, escribió. “Los niños no son enemigos. Cuando los protegemos, cuando defendemos sus derechos, se convierten en personas de paz”.
El padre Faltas también hizo referencia a otro ataque aéreo que, según se informa, impactó una escuela esa misma mañana. Un video que circula en línea muestra a una niña intentando huir mientras las llamas se acercan. Describió la escena como un símbolo de un colapso moral más amplio: "La violencia corroe el corazón de la humanidad como el ácido".

Humanidad compartida
La Custodia de Tierra Santa, bajo la Orden Franciscana, ha servido durante mucho tiempo a las comunidades cristianas en Oriente Medio, incluyendo la educación, la atención médica y los servicios sociales. El P. Faltas, franciscano de origen egipcio, ha sido un firme defensor de la no violencia y el diálogo durante los conflictos pasados en la región.
Invocó el nombre "Adán" —que en hebreo significa "tierra"— para enfatizar la humanidad compartida. "¿Acaso esta madre, que dio vida a diez hijos, dio a luz enemigos?", preguntó. "¿Acaso no salva también con sus manos a los hijos de otros, sin importar quiénes sean?"
Aunque el Vaticano no ha publicado una declaración diplomática oficial sobre el incidente, el artículo señala la preocupación dentro de la Iglesia Católica por el costo humano del conflicto, especialmente para los niños.
El padre Faltas finalizó su reflexión elogiando la resiliencia de la madre de Adam, quien continúa sirviendo como médico a pesar de su pérdida personal.
“Su corazón está herido”, escribió, “pero todavía hay espacio para el amor, todavía hay espacio para difundir la paz”.
El artículo hace eco de los llamamientos anteriores del Vaticano a favor de un alto el fuego inmediato y un corredor humanitario hacia Gaza. El papa Francisco pidió repetidamente la protección de los civiles y una vía negociada hacia la paz, afirmando que "toda vida humana es sagrada". El Santo Padre realizó llamadas telefónicas periódicas a la única parroquia católica de Gaza. Cabe destacar que también afirmó que debería investigarse la posibilidad de que se esté produciendo un genocidio en Gaza.


