Originario de Pagani, el padre Agnello Stoia descubrió su vocación franciscana en un convento de Nocera Inferiore. Fue ordenado sacerdote en 1993 y pasó casi dos décadas en los Apeninos antes de trasladarse a Roma, donde durante ocho años dirigió la parroquia de los Santos XII Apóstoles.
En 2021, fue nombrado párroco de la Basílica de san Pedro, un cargo poco conocido, establecido en el siglo XVI. Descubre la historia del sacerdote encargado de esta majestuosa Basílica.
“Soy párroco de una iglesia única en su género. La Basílica de San Pedro es, ante todo, un monumento sobre la tumba de un apóstol”


