Podríamos decir que los santos son románticos de corazón, amantes profundamente enamorados de Dios. Cuando oraban, lo hacían con el corazón y lo expresaban en sus oraciones. San Agustín, orador elocuente y escritor talentoso, utilizó lo mejor de la cultura romana para formular sus ideas y obras literarias.
Te compartimos una hermosa oración poética escrita por san Agustín, que expresa su humildad y su gran amor a Dios.
Estamos invitados a hacer nuestras estas palabras y a despertar en nuestros corazones el deseo de conocernos a nosotros mismos a la luz de la divina providencia de Dios.


