"En Gaza, niños, familias y ancianos supervivientes se ven reducidos a la inanición", dijo León XIV durante el rezo del Regina Caeli al final de la misa inaugural de su pontificado el 18 de mayo de 2025. Estas palabras del nuevo Papa, pronunciadas en presencia del presidente israelí Isaac Herzog, quien viajó a Roma para la celebración, fueron aplaudidas por la multitud. Desde la Plaza de San Pedro, el Pontífice también lanzó varios llamamientos, en particular por la resolución de los conflictos en Ucrania y Myanmar.
Al final de la Misa, a la que asistieron 200 mil personas y 156 delegaciones oficiales, el nuevo Papa introdujo la tradicional oración mariana, invitando a no olvidar a "los hermanos y hermanas que sufren a causa de las guerras". Denunció en particular la situación en la Franja de Gaza, que sigue sitiada, donde "niños, familias y ancianos supervivientes se ven reducidos a la inanición".
Según el Ministerio de Salud de la Franja de Gaza, los bombardeos israelíes mataron a más de 100 personas durante la noche del sábado al domingo, y más de 53 mil desde octubre de 2023. Entre los líderes políticos que ocuparon los asientos a la derecha del altar durante la misa papal se encontraba el presidente israelí Isaac Herzog.
Tras el fracaso de las conversaciones de Estambul, que fueron rechazadas por Rusia, León XIV también llamó a "negociaciones para una paz justa y duradera" en Ucrania, ante el presidente Volodymyr Zelensky, quien también asistió a la misa. El Papa y el jefe de Estado ucraniano, que hablaron por teléfono el lunes pasado, se reunirán hoy en privado. El nuevo pontífice también mencionó Myanmar, donde "nuevas hostilidades han destrozado vidas de jóvenes inocentes".
León XIV acogió la beatificación del sacerdote francés Camille Costa de Beauregard (1841-1910), que tuvo lugar el sábado en Chambéry. Elogió su ejemplo de "gran caridad pastoral". El 267º Papa también confesó haber sentido "fuertemente" la "presencia espiritual del Papa Francisco que nos acompaña desde el cielo" durante esta misa inaugural de su pontificado, menos de un mes después de la muerte de su predecesor.


