Carlos Aguiar Retes, el segundo de seis hermanos, nació el 9 de enero de 1950 en Tepic, capital del estado de Nayarit, en la costa este del país. Comenzó sus estudios de seminario en Tepic, antes de pasar tres años en Estados Unidos, en el seminario de Moctezuma, cerca de Las Vegas, donde estudió de 1969 a 1972. Ordenado sacerdote en la diócesis de Tepic con solo 23 años, se licenció en Sagrada Escritura en el Pontificio Instituto Bíblico y, en los años 90, se doctoró en Teología Bíblica en la Universidad Gregoriana. Tras ejercer como vicario parroquial, desempeñó diversos ministerios en el campo de la educación, como rector del seminario de Tepic, presidente de la organización de seminarios mexicanos y profesor de Sagrada Escritura en la Universidad Pontificia de México.
En 1997, Juan Pablo II lo nombró obispo de Texcoco, antes de que Benedicto XVI lo trasladara a la arquidiócesis de Tlaneplantla en 2009. Su eficacia se hizo notar en sus diversas funciones nacionales y continentales: fue Secretario General de la Conferencia del Episcopado Mexicano de 2004 a 2006, y luego Presidente de 2006 a 2012. También ocupó diversos cargos dentro del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM), como secretario de 2000 a 2003, vicepresidente de 2003 a 2007 y presidente de 2011 a 2015. En 2007, participó en la redacción del documento de Aparecida y se acercó al cardenal Bergoglio, entonces presidente de la Conferencia Episcopal Argentina y relator general de este encuentro continental organizado en presencia de Benedicto XVI.

Tras haber intervenido en los Sínodos sobre la familia de 2014 y 2015, el primer Papa latinoamericano lo creó cardenal al final del Jubileo de la Misericordia, el 19 de noviembre de 2016. Al margen del consistorio, el cardenal Aguiar Retes expresó su preocupación por el deterioro del tejido social e institucional de México. En entrevista con Radio Vaticano, explicó que:
"La Iglesia debe dar testimonio para construir, para edificar; no para dividir ni polarizar, una Iglesia de diálogo que permita la comunión y la unidad, no solo entre los creyentes o los que forman parte de la Iglesia católica".
Hombre conocido por su apertura intelectual y su firme postura contra la corrupción, dirigió entonces la diócesis de Tlaneplantla, una ciudad de la periferia de la capital mexicana marcada por la pobreza y la violencia.
Cumpliendo con las expectativas, en 2017 sucedió al cardenal Norberto Rivera Carrera como arzobispo de Ciudad de México, una de las mayores del mundo con cerca de cinco millones de bautizados y cerca de mil 500 sacerdotes (diocesanos y religiosos).
El nuevo arzobispo de la capital mexicana parece dar un giro "bergogliano" tras 22 años de gobierno diocesano marcado por el escándalo del fundador de los Legionarios de Cristo, Gabriel Maciel, y por la aparente connivencia con el poder político. Los primeros meses del cardenal Aguiar Retes en esta gran diócesis se caracterizaron por la apertura y la desenvoltura ante los medios de comunicación, pero poco a poco pareció entrar en conflicto con algunos dirigentes diocesanos nombrados por su predecesor, lo que provocó desavenencias en su clero.

La frialdad de las relaciones del cardenal Aguiar Retes con el arzobispo emérito de México fue palpable, particularmente durante la hospitalización en una clínica privada del cardenal Rivera Carrera, gravemente infectado por Covid en enero de 2021. La Diócesis de la Ciudad de México, en un contexto de rigor presupuestal, se negó a cubrir el costo del tratamiento del arzobispo emérito. Los allegados al cardenal Rivera condenaron a su antigua diócesis por "abandonarlo". Más allá de este incidente concreto, la popularidad del arzobispo de México se ha visto considerablemente mermada por las consecuencias de la pandemia de Covid.
El cardenal Aguiar Retes difundió videos para explicar las medidas adoptadas para limitar el riesgo de contagio, pero se retiró de la vida pastoral, delegando la dirección de su diócesis en sus obispos auxiliares. Esta retirada le valió virulentos ataques de parte de su clero. En 2021, el tribunal electoral le sancionó también por sus declaraciones políticas, consideradas contrarias al laicismo. Desde entonces, se ha mostrado mucho más retraído que al inicio de su episcopado en Ciudad de México, y ha limitado sus apariciones públicas. No obstante, fue presidente delegado del Sínodo sobre la Sinodalidad para las dos asambleas de 2023 y 2024, y por tanto se sentó a la mesa del Papa.
Reconocido por sus colegas cardenales de América como un administrador eficaz, este cardenal mexicano podría desempeñar un papel importante en el cónclave, sobre todo si los cardenales optan por la continuidad con el pontificado del Papa Francisco.
Perfil del Cardenal Carlos Aguiar Retes
Ordenación: 22 de abril de 1973
Ordenación episcopal: 29 de junio de 1997
Consistorio: 19.11.2016
Creado cardenal por: Francisco
Familia espiritual: Diocesana
Idiomas hablados: alemán, inglés, español, francés, italiano
Rango y parroquia: Cardenal-Obispo de Santi Fabiano e Venanzio in Villa Fiorelli
Distancia de Roma: 10200
Miembro de la Curia: No
Habla italiano: Sí

