El mundo se ha acostumbrado a ver al Romano Pontífice vistiendo sotana blanca allá donde va. Aunque esta ha sido la tradición en la historia reciente, los Papas no siempre vistieron de blanco.
De hecho, el rojo fue el color papal durante muchos siglos, como señala el siguiente artículo de L'Osservatore Romano:
"Puede sorprender que la primera 'prenda de vestir del Papa' mencionada en las fuentes sea el 'manto' rojo, palabra que Dante pone en boca del Papa Nicolás III permitiéndole presentarse: 'sabed que me cubrí con el gran manto' (Infierno, XIX 69). Esto confirma que para Dante el manto rojo era la prenda que distinguía mejor que ninguna otra el oficio de Papa".
Durante muchos siglos se asoció a los Papas con el rojo y la púrpura real, ya que debía ser un recuerdo del manto que se puso sobre Jesús tras su flagelación.
Era un recordatorio del sufrimiento de Jesús y de su sacrificio final en la cruz.
Sotana blanca
El uso de la sotana blanca no se popularizó hasta el siglo XIII. El Papa Gregorio X (1272-1273) estableció un ceremonial en el que el Papa recién elegido vestía una sotana blanca.
Además, Agostino Patrizi Piccolomini escribió lo siguiente en el siglo XIV:
"Cuando viste un atuendo no sagrado, el Papa solo debe llevar el rojo encima de la roquete: debajo de la roquete, el Papa debe llevar siempre la túnica blanca y calcetines rojos, y sandalias decoradas con cruces doradas".
Cuando el Papa Pío V fue elegido sucesor de san Pedro en el siglo XVI, ya había tres siglos de tradición detrás de los papas que vestían de blanco.
Es cierto que Pío V era dominico y que el hábito de su orden religiosa también era blanco. Siguió vistiendo su hábito religioso blanco como Papa, solidificando así la conexión entre la sotana blanca y el oficio papal.
Guillermo Duranti, en el siglo XIII, nos proporciona el simbolismo de la sotana blanca:
"El Sumo Pontífice aparece siempre vestido con un manto rojo. Debajo, sin embargo, lleva una vestidura blanca: porque el blanco significa inocencia y caridad; el rojo externo simboliza la compasión… de hecho, el Papa representa la persona de Aquel que por nosotros tiñó de rojo sus vestiduras".
Los últimos Papas han mantenido esta tradición y se espera que cualquier Papa futuro conserve el simbolismo de llevar una sotana blanca.


