Los 133 cardenales electores que participarán en el cónclave entrarán en procesión a la Capilla Sixtina el miércoles 7 de mayo para dar inicio a las elecciones, que permanecerán en “absoluto secreto”, pues está prohibido -bajo pena de excomunión- difundir información referente a las votaciones.
Sin embargo, los electores no son las únicas personas que participarán del cónclave y que están autorizadas para permanecer alojadas dentro de los límites establecidos para este periodo.
La participación de estas personas está contemplada en la constitución apostólica Universi Dominici Gregis. Para este cónclave, las personas fueron aprobadas por el cardenal camarlengo, Kevin Farrell, y por sus tres cardenales asistentes.
Según la Oficina de Celebraciones Litúrgicas, el lunes 5 de mayo estas personas -incluidos laicos- presentarán su juramento de absoluto secreto en la Capilla Paulina del Vaticano.

¿Quiénes son estas personas?
Mons. Ilson de Jesus Montanari - secretario del colegio cardenalicio
Mons. Diego Ravelli - maestro de las celebraciones litúrgicas pontificias
Ocho maestros de ceremonias
Dos religiosos de la Sacristía Pontificia
Un sacerdote elegido por el cardenal Pietro Parolin, quien presidirá el cónclave
Varios religiosos que confesarán en las distintas lenguas
Además, la constitución apostólica también contempla la presencia de personal sanitario (médicos y enfermeros) para atender a los cardenales enfermos, así como personal de cocina, limpieza y servicios técnicos.
También habrá encargados de ascensores, decoración floral y transporte de los cardenales desde la residencia de Santa Marta -lugar donde serán hospedados- hasta la Capilla Sixtina.
La seguridad también está contemplada. Un coronel y un mayor de la Guardia Suiza serán los encargados de custodiar la Capilla Sixtina, pero también participarán diferentes colaboradores de los servicios de vigilancia y protección civil del Vaticano, incluido el director.
¿Qué dice el juramento?
El juramento será administrado por el cardenal camarlengo, asistido por dos pronotarios apostólicos y debe realizarse siguiendo la siguiente fórmula:
Yo N. N. prometo y juro observar el secreto absoluto con quien no forme parte del Colegio de los Cardenales electores, y esto perpetuamente, a menos que reciba especiales facultades dadas expresamente por el nuevo Pontífice elegido o por sus Sucesores, acerca de todo lo que atañe directa o indirectamente a las votaciones y a los escrutinios para la elección del Sumo Pontífice.
Prometo igualmente y juro que me abstendré de hacer uso de cualquier instrumento de grabación, audición o visión de cuanto, durante el período de la elección, se desarrolla dentro del ámbito de la Ciudad del Vaticano, y particularmente de lo que directa o indirectamente de algún modo tiene que ver con las operaciones relacionadas con la elección misma.
Declaro emitir este juramento consciente de que una infracción del mismo comportaría para mí la pena de excomunión latae sententiae reservada a la Sede Apostólica.
Así Dios me ayude y estos Santos Evangelios que toco con mi mano.

