"En este momento, Roma es un pueblo de luto por su obispo", explicó el cardenal Baldassare Reina, vicario general de la diócesis de Roma, durante la tercera Misa de los Novendiales, celebrada en la Basílica de San Pedro el 28 de abril de 2025. Su homilía se mantuvo en la línea del papa Francisco, denunciando las "pretensiones ideológicas que desgarran la unidad de las vestiduras de Cristo". Dedicada hoy a los fieles de la diócesis de Roma, esta Misa se celebró en presencia de algunos cardenales, que están viviendo una semana de congregaciones generales en preparación al cónclave que se abrirá el 7 de mayo.
"En este momento, cuando el mundo arde y pocos tienen el coraje de anunciar el Evangelio traduciéndolo en una visión de un futuro posible y concreto", la humanidad parece estar poblada de "ovejas sin pastor", explicó el cardenal Reina, nombrado en 2024 por el papa Francisco para gobernar la diócesis de la capital italiana en su nombre.
Subrayó que este tiempo de discernimiento para la búsqueda del nuevo Obispo de Roma "no puede ser un tiempo de equívocos, de tácticas, de prudencia, un tiempo que ceda al instinto de vuelta atrás, o peor aún, a represalias y alianzas de poder".
Al contrario, "se necesita una disposición radical para entrar en el sueño de Dios confiado a nuestras pobres manos", subrayó, poniéndose decididamente en la continuidad del Papa Francisco.
"No podemos ceder a esa pereza mental y espiritual que nos ata a las formas de experiencia de Dios y a las prácticas eclesiales conocidas en el pasado y que deseamos ver repetidas hasta el infinito, subyugados por el miedo a las pérdidas asociadas a los cambios necesarios", advirtió.
Refiriéndose a los "numerosos procesos de reforma en la vida de la Iglesia iniciados por el papa Francisco, que transcienden las afiliaciones religiosas", el italiano de 54 años subrayó que el difunto pontífice fue reconocido "como un pastor universal, y la barca de Pedro necesita esta amplia navegación que va más allá de las fronteras y las sorpresas".
“La lógica del mundo ”
Poniendo en guardia contra el impasse de las "exigencias ideológicas que desgarran la unidad de las vestiduras de Cristo", el cardenal Reina, por el contrario, esperaba que el futuro jefe de la Iglesia católica pudiera situarse en la continuidad de "la compasión de Jesús". El futuro Papa deberá pues permanecer fiel a los "profetas que manifiestan el dolor de Dios al ver al pueblo disperso y maltratado por malos pastores".
Los cardenales deben buscar un pastor "que no ceda a la prepotencia y que tenga el coraje de no doblegar el Evangelio a los trágicos compromisos del miedo, a la complicidad con la lógica del mundo, a alianzas ciegas y sordas a los signos del Espíritu Santo", subrayó.
El futuro Papa tendrá que seguir los pasos de "Jesús, el buen pastor que da la vida por sus ovejas y responde con el perdón pedido al Padre, mientras muere abandonado por sus amigos".
El cardenal Reina desarrolló la parábola del sembrador y la semilla que cayó en tierra, trazando un paralelo directo con el Papa Francisco. "Este gesto extremo, total, agotador del sembrador me hizo pensar en el día de Pascua del papa Francisco, en aquella entrega sin reservas para bendecir y abrazar a su pueblo, la víspera de su muerte", enfatizó. El Domingo de Pascua, un exhausto Papa Francisco apareció en la logia de la Basílica de San Pedro antes de dar un paseo en el Papamóvil.
"Gracias, Papa Francisco", concluyó, pidiendo que la Virgen María "acompañe y vele por sus restos mortales, reciba su alma y nos proteja en el cumplimiento de su misión".
Seis Misas en memoria del Papa Francisco se celebrarán nuevamente esta semana, cada una a última hora de la tarde a las 17.00 horas. en la Basílica de San Pedro, presidida cada día por un cardenal diferente.

