Tienes todas estas razones para ser feliz en abril

Abril es una época maravillosa del año. No solo es primavera, cuando la naturaleza despierta con árboles en flor y el canto de los pájaros, sino que también es época de grandes celebraciones en la Iglesia Católica. Aunque algunos son grandiosos, otros más simples, están sin embargo imbuidos de un toque de gracia. En 2025, el mes de abril es muy especial, y no solo porque la Pascua se celebra el 20 de abril. Aquí tienes una pequeña guía de los eventos que no te puedes perder en abril, con algunas ideas para aprovecharlos al máximo:

La Semana Santa tiene lugar este año del 13 al 20 de abril. Entre las celebraciones que marcan el período previo a la Pascua –Misa del Domingo de Ramos, Misa de la Cena del Señor , Misa de la Pasión , Vigilia Pascual y Misa de Pascua–, una de ellas ocupa un lugar especial: la Vigilia Pascual, en cuanto que reúne, a través de sus ritos, todos los elementos del mensaje pascual.

Celebrada este año el 20 de abril, la Pascua es la fiesta más importante de la espiritualidad cristiana. Marcando el final de la Cuaresma, es una oportunidad para dejar brotar la alegría de la Resurrección. Alegría y Resurrección, dos palabras que son una con la naturaleza de esta celebración pero que son también una con la naturaleza profunda del cristianismo. Este año, debido a una concordancia de los calendarios juliano y gregoriano, las Iglesias ortodoxa y católica celebrarán la Pascua el mismo día.

La buena noticia es que para los católicos la Pascua no se limita a un solo día: se extiende durante los 50 días del tiempo pascual hasta Pentecostés, que este año se celebra el 8 de junio. Un tiempo para saborear la alegría de 
la Resurrección de Cristo. Los fieles reanudan luego el Aleluya, que había permanecido en silencio durante la Cuaresma, este canto hebreo de victoria que significa "Alabado sea Dios". Esta alegría se expresa también en el color de los ornamentos litúrgicos, que son blancos durante todo el tiempo Pascual, excepto el día de Pentecostés que son rojos, simbolizando así al Espíritu Santo. 

La visión de Jesús que tuvo Santa Faustina Kowalska dio lugar a la institución del Domingo de la Divina Misericordia, que se celebra el segundo domingo de Pascua, el 27 de abril de este año. Un día dedicado a acoger la infinita misericordia de Dios, y el momento ideal para rezar la Coronilla de la Divina Misericordia, confesarse y mostrar misericordia a los seres queridos. 

Para la Iglesia, cada mes del año tiene una devoción particular. El mes de abril está dedicado, entre otras cosas, a la Eucaristía. Sacramento instituido por Jesús durante la Última Cena (Lc 22,19 ) que nos permite unirnos a Dios de un modo único en cuerpo y alma. 

Abril está lleno de santos maravillosos, empezando por san Jorge (23 de abril). Famoso por haber vencido a un dragón (metafóricamente o no, sigue siendo bastante impresionante), san Jorge nos anima a enfrentarnos a nuestros propios dragones, ya sea el miedo, la duda o una montaña de ropa sucia. San Marcos Evangelista (25 de abril) nos recuerda que compartir la Buena Nueva es tarea de todos. Tómate un momento para compartir un versículo bíblico alentador en las redes sociales en lugar de tu última foto de vacaciones o un delicioso postre. Finalmente, santa Catalina de Siena (30 de abril), Doctora de la Iglesia y patrona de Europa, inspiró a muchas personas que deseaban crecer en su fe, en particular gracias a su "Diálogo". 

Un acontecimiento muy esperado: la canonización del beato Carlo Acutis tendrá lugar el 27 de abril, con motivo del Jubileo de los Adolescentes, que se celebrará en Roma del 25 al 27 de abril de 2025. Un evento al que jóvenes y mayores están deseosos de participar, atraídos por la espiritualidad del joven "geek de Dios".

Mayo es tradicionalmente el mes de María, pero abril es el momento perfecto para reavivar la devoción mariana. ¿Por qué no empiezas a incorporar el Ángelus (en lugar del Regina Caeli durante la Pascua) o añades el Rosario a tu rutina diaria?

Abril, con sus temas de renovación y misericordia, es el momento ideal para una pequeña limpieza espiritual de primavera. Es un buen momento para confesarse, dejar atrás los rencores y revitalizar la vida de oración. Y si lo que quieres es limpiar el desorden de la casa, ¡debemos verlo como una gracia más!

Un mes lleno de fe, alegría y oportunidades de renovación. Ya sea que estés celebrando la Pascua, invocando a tu santo favorito o abrazando la misericordia de Dios, abril tiene algo especial en la Iglesia Católica. Disfruta y recuerda: los chocolates de Pascua son solo un beneficio adicional.