En un mundo cada vez más digital y aislado, el contacto físico humano se ha vuelto más importante que nunca. Un simple abrazo tiene el poder de sanar heridas emocionales, reducir el estrés y mejorar el bienestar general.
No es de extrañar que el 21 de enero se celebre el Día Internacional del Abrazo, un día para reconocer el poder de este simple gesto y animarnos a abrazarnos con más frecuencia.
¿Qué hay detrás de un abrazo?
Los abrazos liberan oxitocina, una hormona que promueve el vínculo, la confianza y la empatía. También reducen los niveles de cortisol, la hormona del estrés. Como resultado, los abrazos pueden ayudarnos a sentirnos más relajados, seguros y conectados con los demás.
Por lo general, cuando abrazamos a alguien para saludarlo, tiene una duración media de tres segundos. Sin embargo, la ciencia señala que cuando un abrazo se prolonga, alcanzando los 20 segundos o más, este produce un efecto terapéutico en el cuerpo y mente.
Además, tiene efectos positivos en la salud, tales como:
- Reducción de la presión arterial.
- Mejoras en la salud cardiovascular.
- Fortalecimiento del sistema inmunológico.
- Alivio ante el dolor.
- Rejuvenecimiento en el cuerpo al estimular el nivel de oxígeno en la sangre.
¿Cuántos abrazos necesitamos al día?
Después de conocer los beneficios de abrazar, seguro te preguntarás cuántas veces debes hacerlo para mejorar tu salud física y mental.
Un estudio realizado por científicos de la Universidad de Duke constató que, desde que llegamos a este mundo, necesitamos de abrazos y caricias para evitar que nuestras neuronas mueran. De ahí la importancia del trato físico de una madre hacia su hijo recién nacido.
Por lo tanto, la respuesta a esta pregunta la tiene un estudio realizado por Virginia Satir, psicoterapeuta familiar, que asegura que se necesitan cuatro abrazos al día para sobrevivir, ocho como mantenimiento y doce para el crecimiento personal.
Aquí hay algunas formas de incorporar más abrazos en tu vida:
- Abraza a tus seres queridos cuando te veas con ellos.
- Saluda a tus amigos y compañeros de trabajo con un abrazo.
- Abraza a tus mascotas.
- Ofrece abrazos a las personas que parecen necesitarlos.
La humanidad y el contacto físico
El contacto físico es un lenguaje no verbal que forma parte de nuestra humanidad; sin él, nuestra vida no sería igual, viviríamos más estresados y aislados. Si bien, es verdad que hay ciertos abrazos que solo damos a nuestros seres queridos o a nuestra pareja, puesto que generan un vínculo de intimidad, es bueno presentar nuestra calidez de forma respetuosa y adecuada hacia los demás.
Los abrazos son un regalo precioso que todos podemos dar y recibir. Así que la próxima vez que te sientas estresado, ansioso o simplemente necesites un poco de amor, no dudes en pedir un abrazo.
Y no tengas miedo de dar abrazos a tus amigos, familiares y seres queridos. Un abrazo puede marcar la diferencia en el día de alguien.