Esta defensa del pontífice llega después de una semana romana particularmente turbulenta por el caso Orlandi, la historia de esta hija de un empleado del Vaticano desaparecido en el centro de Roma hace casi 40 años, el 22 de junio de 1983. Recientemente, la justicia vaticana accedió a reabrir la investigación.
El pasado martes, el hermano de Emanuela Orlandi -que lucha por esclarecer la desaparición de su hermana- fue entrevistado durante 8 horas por la promotora de justicia del Vaticano.
Por la noche, Pietro Orlandi hizo declaraciones sensacionalistas en el programa de entrevistas de la televisión italiana 'Di Martedì' del canal La7. Mencionó el audio testimonio de un mafioso que mencionaría las salidas nocturnas de Juan Pablo II con dos 'Monsignori' polacos; salidas en las que el Papa "ciertamente no iba a bendecir las casas". Una forma de decir que el mismo Papa podría permitirse la explotación de menores.
El cardenal polaco Stanislaw Dziwisz, arzobispo emérito de Cracovia y exsecretario de Juan Pablo II, reaccionó enérgicamente denunciando "acusaciones inconexas, falsas de principio a fin, poco realistas, risibles, casi cómicas si no fueran ellas mismas trágicas, incluso criminales".
El 14 de abril, el director editorial de Vatican Media, Andrea Tornielli, partió un artículo publicado por el portal oficial Vatican News para denunciar en estas acusaciones una "locura". "Si esta masacre mediática entristece y consterna, hiriendo el corazón de millones de creyentes y no creyentes, la difamación debe ser denunciada, porque es indigno de un país civilizado tratar así a una persona, viva o muerta, sea clérigo o laico, papa, metalúrgico o joven desempleado", escribió.
El sábado por la mañana, tras una audiencia en el Vaticano de la abogada de Pietro Orlandi, Laura Sgrò, los medios vaticanos publicaron un artículo asegurando que la abogada y su cliente "se niegan a dar nombres" para sustentar las acusaciones vertidas contra Juan Pablo II.
"Ni Pietro Orlandi ni la abogada Laura Sgrò han tenido a bien proporcionar al promotor nombres o elementos útiles sobre las fuentes de estas declaraciones y su credibilidad", se puede leer. El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, incluso aseguró que Laura Sgrò se había mantenido en silencio, invocando el "secreto profesional".
Durante el día, la abogada reaccionó rápidamente declarando que el Vaticano la estaba presionando incitándola a violar su ética, lo que el Vaticano negó rotundamente el sábado por la noche.
La abogada aseguró además que su defendido entregó una lista de 28 nombres al promotor de justicia durante su audiencia del 11 de abril y que Pietro Orlandi se mantuvo "totalmente disponible" para aportar otros elementos. Laura Sgrò justifica haber guardado silencio ante la promotora de justicia asegurando que le correspondía a su defendida, y no a ella, dar información.