El Papa a la Orden de Malta: «¡Recen por mí. Este trabajo no es fácil!»

«¡Recen por mí. Este trabajo no es fácil!», pidió el papa Francisco a los miembros de la Orden de Maltaal recibirlos en audiencia privada este 30 de enero de 2023. «Agradezco a Frey John Dunlap, Lugarteniente del Gran Maestre, las expresiones de lealtad y esperanza que me ha dirigido en nombre de todos vosotros», dijo el Pontífice. 

La promulgación por el Papa de la nueva constitución de la Orden de Malta el pasado mes de septiembre puso fin a seis años de reformas marcadas por numerosos contratiempos. Y con la audiencia privada de hoy se abre un nuevo capítulo de «normalización» de las relaciones entre la Santa Sede y la Soberana Orden. 

El pontífice decidió reforzar el estatus religioso de la Orden y suprimir los requisitos de nobleza para acceder a sus más altos cargos. También los «caballeros profesos», miembros religiosos laicos que dirigen la institución, tendrán que hacer en el futuro un voto de pobreza y estarán plenamente dedicados a su misión dentro de la Orden.

A lo que el Papa comentó: «También han considerado concretamente cómo sostener la vida comunitaria y el compromiso de la Orden en este sentido. Les felicito por ello. También considero justa y prudente la decisión de no obligar a la vida comunitaria a quienes, al profesar, sabían que no estaban obligados a ella, y afirmar al mismo tiempo que todos están invitados a abrazarla. Por tanto, quienes hagan profesión solemne a partir de ahora, conscientes de que conlleva vida comunitaria, asumirán la obligación con plena libertad.»

Para garantizar el éxito de la reforma, la Orden eligió «por unanimidad» a los nuevos Altos Cargos del Consejo para el periodo 2023-2029. (26.01.2023).  

«Agradezco la decisión de reabrir un noviciado», dijo el Papa: «No sólo para la profesión religiosa, sino también para la segunda clase, los primeros colaboradores de los profesos, y la tercera clase. Para mantener vivas tantas obras meritorias, es necesario rezar para que el Señor envíe ‘buenos obreros’, suscitando vocaciones en todas las clases, especialmente a la profesión religiosa, que vive y expresa plenamente la vocación juanista.»

El Papa saludó a los nuevos altos cargos y a los miembros del nuevo Consejo, «elegidos en el Capítulo General que acaban de concluir». Les instó a seguir «dando gratuitamente lo que habéis recibido gratuitamente» y continuar dando testimonio de Cristo «en el servicio a los pobres y a los enfermos es un camino que llena el alma.»

La fase de integración de la reforma comenzó con el Capítulo General, que inició el 25 de enero, y concluyó el domingo pasado. Los resultados han sido presentados al Papa Francisco hoy. En el Capítulo General Extraordinario se eligieron los Altos Cargos del Consejo Soberano para un periodo de seis años. 

Gran Comendador: Frey Emmanuel Rousseau.

Gran Canciller: Riccardo Paternò di Montecupo.

Gran Hospitalario: Frey Alessandro de Franciscis.

Recibidor del Común Tesoro: Fabrizio Colonna di Paliano. 

Así el Soberano Consejo nombrará el Gran Maestre de la Orden, que había estado sin uno desde la muerte de Frey Giacomo della Torre del Tempio di Sanguinetto el 29 de abril de 2020. 

La elección del nuevo Gran Maestre (en breve) y del equipo que le apoyará será decisiva para el futuro de la Orden y su relación con la Santa Sede.

El Papa asimismo aplaudió la decisión de optar por «una adecuada formación de los profesos, así como de los caballeros de segunda clase, al significado concreto de la promesa de obediencia hecha. Tampoco debe descuidarse la formación de la tercera clase, de la que espero puedan nacer vocaciones sólidas para las distintas dimensiones del servicio en la Orden».

Al Capítulo General Extraordinario asistieron 111 miembros de la Orden de Malta procedentes de los cinco continentes. El Capítulo concluyó el domingo 29 de enero, y este lunes ha sido el esperado encuentro con el Papa para entregarle los resultados.

El Capítulo de la Orden de Malta estuvo presidido por el Lugarteniente del Gran Maestre Frey John Dunlap (escogido para la misión de ayudar a la nueva transición) y el cardenal Silvano Maria Tomasi, delegado especial de Francisco. 

Este Capítulo – según la Orden de Malta- , que se reúne cada seis años, ha sido una ocasión para cumplir con la misión de velar por el carisma de la Orden y actualizarlo, sin evitar los problemas y tratarlos. 

El Papa les instó a seguir por este camino de la caridad, mirando a Jesús:

«Queridos hermanos y hermanas, ustedes han escrito una página muy importante de la historia de la Orden de Malta, gracias, pueden estar orgullosos de ello.

Les exhorto a permanecer fieles a Cristo, Maestro y Señor, y a seguir adelante, llevando por todo el mundo su mensaje de curación para los enfermos y de consuelo para los afligidos.

De esto daremos cuenta un día a Dios Padre: de haber sido sus testigos fieles, cercanos al prójimo, no movidos por aspiraciones mundanas, sino ardientes en el servicio y el testimonio del Resucitado». 

En otro momento, el Sucesor de Pedro se detuvo en tres palabras que definen la identidad de la Orden:

«Se trata de una soberanía muy singular, – explica el Papa – asumida a lo largo de los siglos y confirmada por la voluntad de los Papas. Esta les permite realizar generosos y exigentes gestos de solidaridad, volviéndolos cercanos a los más necesitados, bajo la tutela jurídica diplomática internacional».

Luego habló de lo que significa «militar» para la Orden:

«Para la defensa de los peregrinos y de los santos lugares, así como de la Cristiandad, su Orden ha escrito páginas gloriosas». «Hoy, – precisa – esas gestas ceden el lugar al diálogo interreligioso. Además, la fe en Cristo y el seguimiento de Él los comprometen en el testimonio del Evangelio y en la lucha contra todo lo que se opone a él».

Y por último, el Papa explica qué significa «hospitalaria». Recuerda que la «Orden tiene su origen en el servicio que el Beato Gerardo ofrecía a los peregrinos en Jerusalén, en el Hospital que lleva el nombre de San Juan Bautista, que más tarde se convirtió en su Patrono».

Allí, Gerardo, con los primeros frailes, «acogió a los peregrinos y a los necesitados, proporcionándoles los cuidados médicos que requerían, y esto se puede ver hoy en la pluralidad de sus obras», precisa.

Cabe recordar que el papa Francisco el 25 de enero de 2017, había pedido la dimisión del entonces Gran Maestro de la Orden de Malta, Matthew Festing, debido a problemas que desembocaron hasta el nombramiento de un Delegado Pontificio, el 1 de noviembre de 2020, el cardenal Tomasi, alto prelado con una trayectoria impecable en el ámbito diplomático. 

El Obispo de Roma solicitó hace seis años la dimisión de Festing posteriormente a que esa institución rechazara una inspección de la comisión nombrada por Francisco para aclarar el cese del Gran Canciller de la Orden de Malta, Albrecht Freiherr von Boeselager.

La Orden de Malta había pedido a Albrecht von Boeselager que dejara de ser su canciller debido a que bajo su cargo se distribuyeron, presuntamente, preservativos en África y en Asia por parte de organizaciones que colaboraban con el Orden. Junto con otras anomalías, esto hizo que el Papa pidiera una «renovación espiritual y moral» de la Orden. 

La historia de la Orden de Malta comenzó en Tierra Santa en 1048 con la fundación de la comunidad religiosa de los Hospitalarios de San Juan. Orden religiosa y laica de la Iglesia católica desde 1113 y sujeto de derecho internacional, mantiene relaciones diplomáticas con más de cien Estados, así como con la Unión Europea, y tiene estatus de observador permanente en las Naciones Unidas.

Presente en 120 países, la Orden de Malta ayuda a las personas necesitadas mediante actividades médicas, sociales y humanitarias. En su página web, la Orden explica que está formada por más de 13.500 Caballeros, Damas y Capellanes. Junto a ellos trabajan unos 80.000 voluntarios permanentes, así como 42.000 empleados, en su mayoría personal médico.