La Catedral de Nuestra Señora de Arabia es una catedral católica en la ciudad de Awali, Bahréin. Se levanta sobre un terreno de 9.000 m² donado por el rey de Bahréin, el jeque Hamad bin Isa Al Khalifa, el 11 de febrero de 2013, en memoria de Nuestra Señora de Lourdes.
El 19 de mayo del 2014 Al Khalifa visitó al Papa Francisco en el Vaticano, y le presentó los planos de la catedral. En esa misma visita, Papa Francisco le regaló la que sería la "piedra fundamental".
Se trata de un ladrillo colocado en la Puerta Santa de la Basílica de San Pedro al final del año santo extraordinario 1983-1984 y extraído con motivo de la apertura de la misma puerta por Juan Pablo II al comienzo del Gran Jubileo de 2000.
La primera piedra fue colocada el 31 de mayo de 2014 y fue consagrada el 10 de diciembre de 2021 por el cardenal Luis Antonio Tagle, prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos. Bahréin es el país islámico con más católicos de la península arábica.
El Conjunto Catedralicio
El conjunto catedralicio tiene forma triangular y está dividido en cuatro partes: un aparcamiento subterráneo, la Catedral, un centro pastoral de última generación y la residencia del Obispo con la casa de huéspedes.
La Catedral
La Catedral puede contener hasta 2300 personas y tiene la forma de arca, muy significativa: donde Dios se encontraba con Moisés y el pueblo:
La iglesia posee una hermosa cúpula octogonal. Esta forma es altamente simbólica, ya que en el pensamiento judeocristiano el número ocho representa con frecuencia los comienzos, la resurrección, la salvación, la sobreabundancia y la eternidad.
En tres de las cuatro esquinas de la Catedral se encuentran las siguientes capillas: la Capilla del Santísimo Sacramento; la Capilla de Nuestra Señora de Arabia (para 160 personas); y la Capilla de los Confesionarios.
Capilla del Santísimo Sacramento a Capilla de Nuestra Señora de Arabia (también para 160 personas)Capilla de los Confesionarios.
Iconografía
Hay dieciséis importantes íconos pintados al estilo propuesto por el Camino Neocatecumenal, que decoran el interior de la catedral: Jesús Pantocrátor; La Santísima Trinidad; La Anunciación; La Natividad de Jesucristo; El bautismo de Nuestro Señor Jesucristo; La Transfiguración; La entrada a Jerusalén; La Última Cena; La Crucifixión; El entierro de Jesús; El descenso a los infiernos; La Resurrección; La aparición a los Apóstoles; La Ascensión; Pentecostés; La muerte de la Virgen María.
Estos íconos presentan en un lenguaje visual unificado la historia de la salvación.
La imagen de Nuestra Señora de Arabia
La historia indica que la devoción a Nuestra Señora de Arabia comenzó el 8 de diciembre de 1948.
Ese día se dedicó la pequeña capilla de Ahmadi, en Kuwait, a Nuestra Señora de Arabia, cuya imagen original deriva de una pintura de Nuestra Señora del Monte Carmelo.
La estatua de Nuestra Señora en Ahmadi fue bendecida en 1949 en el Vaticano por el Papa Pío XII, quien posteriormente proclamó la Realeza de María en 1954.
A principios de 2007, el obispo Camillo Ballin, recibió el permiso de la Santa Sede para que se estableciera una fiesta en honor de la Santísima Virgen María bajo el título de Nuestra Señora de Arabia.
El 5 de enero de 2011, la Santa Sede proclamó oficialmente a Nuestra Señora de Arabia como Patrona de los dos Vicariatos de la Península Arábiga.
La Madre de Dios es reconocida también por los musulmanes como la madre del gran profeta Isa. Por más de 1.300 años, los árabes leen en el Corán este elogio a la Virgen:
En el Corán, María es la única mujer llamada por su nombre, a las otras mujeres se les mencionan como hija, esposa o hermana.
Fuente: bahraincathedral.org