Amada monarca de los británicos, con una longevidad récord y una inmensa popularidad, la reina Isabel II murió el 8 de septiembre a la edad de 96 años en su residencia escocesa de Balmoral.
Mientras llegan tributos de todo el mundo y los británicos lloran a su querida reina, los próximos días hasta el funeral de Isabel II se organizarán de acuerdo con un protocolo muy preciso que responde al nombre en clave «London bridge is down».
Lo que literalmente significa: “El puente de Londres se ha derrumbado”. A partir de la muerte de la Reina, el país entró en un período de duelo nacional de diez días. Las banderas se bajan en todo el país durante un día.
Castillo de Windsor
El funeral se llevará a cabo nueve días después de la desaparición de la Reina. Los negocios y tiendas estarán cerrados y los mercados de valores no abrirán. El Big Ben sonará a las 9 a. m. y una procesión guiará el ataúd desde el Palacio de Buckingham hasta la Abadía de Westminster, llegando a él a las 11 a. m. Se espera que el arzobispo de Canterbury, el que casó a Kate y William y Meghan y Harry, celebre el funeral al que asistirán miembros de la realeza, políticos y jefes de estado de todo el mundo.

Al término de la ceremonia, la monarca será transportada en el mismo coche que su padre, Jorge VI, cuando éste falleció en 1952. Este último viaje la llevará a su entierro en el Castillo de Windsor, en la Capilla de San Jorge. Allí permanecerá junto a su padre y su esposo, el príncipe Felipe, quien murió en abril de 2021.
