Si sor Philomena Nduku, carmelita de la estricta observancia, nacida en Kenia hace 44 años, recupera la salud después de siete años de terribles dolores en la columna vertebral, será gracias a la generosidad de lectores de Aleteia.
Como ya informamos en junio pasado, la hermana Philomena, que forma parte del convento fundado en Kenia por monjas del Monasterio de la Purísima Concepción de Utrera (España), padecía terribles dolores de espalda, que únicamente podía superar con una operación quirúrgica.
La comunidad acudió a Aleteia para que nuestros lectores pudieran ayudarlas, con este gran problema, ya que su comunidad nunca podría contar con el dinero suficiente para poder afrontar la operación.
La religiosa envió a Aleteia una carta, no como grito de ayuda, sino más bien como humilde testimonio de una bella vocación a la vida contemplativa.
La lesión
Después de cinco años de que sor Philomena hubiera profesado sus votos solemnes, la comunidad local pidió la creación de un nuevo monasterio carmelita en Zimbabue. África, de hecho, es un continente de crecimiento para esta congregación.
Después de obtener el permiso de la Santa Sede y del prior general de la Orden Carmelita, el padre Fernando Millán Romeral, seis monjas fueron elegidas para ir a esta nueva misión en Zimbabue, entre ellas la hermana Philonena.
El 2 de febrero de 2015 llegaron a ese país para comenzar la nueva fundación en la diócesis de Mutare. En su camino a Zimbabue, la hermana Philomena se cayó en el aeropuerto, y se lesionó la espalda.
En 2018, el dolor se hizo intenso y acudió al médico de cabecera, que le mandó hacer fisioterapia. Después de algunos años, el doctor notó que no había mejoría, así que le pidió que me hiciera una resonancia magnética. Cuando la vio, la remitió al doctor Kelvin Nemayire, especialista en neurocirugía.
Cuando el doctor Kelvin vio los resultados, constató que los discos se habían salido de la posición correcta: están tocando los nervios, motivo de los fuertes dolores de espalda que sufría al trabajar, al dormir, y al estar en oración, incluso al estar sentada…
Ayuda
El neurocirujano africano, que cuenta con una amplia experiencia en operaciones de este tipo, diagnóstico como único remedio la cirugía.
Ahora, podemos anunciar que, gracias a la generosidad de los lectores de Aleteia, que han contribuido parcialmente para cubrir los costes de la operación quirúrgica, sor Philomena será intervenida en el 2 de septiembre.
En una conversación telefónica, la religiosa carmelita cuenta a Aleteia como está afrontando estos días previos a su operación: “Quiero agradecer a Dios por sostenerme en mi vida y sobre todo durante los momentos de dolor que he sufrido desde hace siete años en la espalda”.
“Todo lo he ofrecido por la santificación de todas las almas”, sigue explicando sor Philomena.
“Solo la oración puede sustentar la vida en todas las situaciones, especialmente en las adversas – añade –. Orar es abrirse a ese otro que puede sostenernos cuando necesitamos ayuda. Pero también, cuando una persona está bien, orar es sostener a otros que lo necesitan. Es la experiencia más universal del Amor. Ejercitar tu fe y confianza. Ahora es el mejor momento para ponerlo en práctica, ahora tendré tiempo y serenidad para conversar con Él”.
Gracias a los lectores de Aleteia
Sor Philomena pide a todos los lectores de Aleteia que la tengan presente en sus oraciones con motivo de su operación. Les agradece la generosidad, ya que sin sus donativos ella seguiría con terribles dolores, y les pide, con total humildad, un pequeño donativo, ya que los gastos del ingreso no han quedado cubiertos en su totalidad.
“He estado esperando la ayuda de Dios con mucha paciencia –revela la carmelita–. Dios ha manifestado su Providencia divina gracias a la ayuda de muchas personas para que pueda pasar por la operación en el Hospital Murambi Garden de Mutare, Zimbabue”.
Sor Philomena y su comunidad confirman su emoción y alegría espiritual al experimentar tanta generosidad de parte de los benefactores. Aseguran que siempre les recordarán en sus oraciones y sacrificios diarios.
Dirigiéndose a cada uno de los lectores de Aleteia, la religiosa afirma: “quiero que sepan que todo es posible en Dios. Si yo confío en Él y tengo fe en Él, me va a ayudar y asistir a los doctores en ese proceso. Por eso, les ruego oren por mí, para que pueda aceptar la realidad con valentía, sin tener miedo. Su ayuda también es necesaria a través de la oración y el apoyo para pagar los gastos extras del ingreso hospitalario”.
Es posible contribuir con los gastos de la operación quirúrgica de sor Philomena a través del servicio ofrecido por la Fundación DeClausura en este enlace: https://declausura.org/donativos
Indique por favor, en el comentario, que su donativo está destinado a la salud de sor Philomena.
Aleteia, red global católica de información, en virtud de su misión fundacional, contribuye, en colaboración con la Fundación DeClausura, a comunicar la vida y espiritualidad de los monasterios y conventos contemplativos.
Hoy celebramos a...